"Necesito que me den más tiempo para aprobar las oposiciones"

Tiene un diploma en Trabajo Social, pero Jezabel Cases, trabaja de celadora en el Servicio Valenciano de Salud. "Lo que hago no tiene nada que ver con mi titulación. Me tengo que conformar con lo que va saliendo", explica claramente desde un teléfono adaptado en su domicilio de Mislata (Valencia).

Jezabel, de 27 años, padece una minusvalía auditiva del 38%. Ello no le ha impedido estudiar pero se convierte en una barrera infranqueable cuando se presenta a oposiciones."En tres intentos no he conseguido aprobar una. Necesito más tiempo y esfuerzo para concentrarme. Si quieren, me dan un poquito más de tiempo, pero la mayoría de las veces, ni eso", explica.

El examen es sólo el último obstáculo. El mayor aparece en la academia donde se prepara. "Lo único especial que hacen es sentarme en la primera fila. Intento pillar todo lo que dicen, pero a veces me pierdo cosas importantes. Me cuesta el doble que a los demás entender y estudiar aunque si me dan tiempo, lo logro", afirma.

Hasta ahora Jezabel ha conseguido empleos temporales. "Estoy en una bolsa de trabajo, y me llaman para dos meses, para seis, para ocho". Tampoco en el trabajo ha encontrado facilidades. "Sin audífonos no oigo nada. Para hablar por teléfono necesito uno adaptado, pero nunca me lo han ofrecido", relata tranquila.

Jezabel pertenece a Fiapas, la Confederación española de Padres y Amigos de los Sordos. "El decreto es una nueva oportunidad", dice Carmen Jáudenes, directora técnica de la confederación. "Pero hace falta mucha más formación. En las personas con discapacidad, y en las que forman parte de los tribunales de las oposiciones".