La bailarina Aída Gómez y la coreógrafa Teresa Nieto logran los nacionales de danza

La bailarina Aída Gómez (Madrid, 1967) y la coreógrafa Teresa Nieto (Tánger, 1953) obtuvieron ayer los premios nacionales de Danza en las modalidades de interpretación y creación, respectivamente. La primera fue directora del Ballet Nacional de España y fue destituida por el anterior director del INAEM, Andrés Amorós. Teresa Nieto, miembro fundadora de Bocanada y tras una larga trayectoria en el trabajo de la fusión entre la danza contemporánea y el flamenco, se ha afianzado al frente de su grupo, Arrieritos, con el que ha cosechado triunfos y reconocimiento.

Aída Gómez es la mejor bailarina de su generación y su biografía fue una sucesión de logros y triunfos hasta que llegó a la dirección del Ballet Nacional de España el 1 de enero de 1998. Incomprensiones y luchas burocráticas la ponen contra las cuerdas y el Ministerio de Cultura opta por destituirla tres años más tarde. Ahora, la misma dirección general, pero con otro color político, le concede un galardón merecido y que suena obligatoriamente también a resarcimiento moral. La bailarina acaba de llegar de China, "una gira agotadora, fuerte, pero aquél es un país muy interesante y hemos tenido mucho éxito".

Especialista de gusto exquisito en las danzas más refinadas del clásico español o la Escuela Bolera (en la profesión se la llamaba cariñosamente "la nueva Fanny Elssler"), también ha emprendido la aventura de la coreografía y la de tener compañía propia: "Eso siempre es difícil, es un quebradero de cabeza, pero si amas esta profesión, te empeñas y lo haces".

Aída Gómez recibió en el coche la llamada del Ministerio de Cultura para comunicarle el fallo. Iba a un ensayo de la nueva película de Carlos Saura que versará sobre la suite Iberia, de Isaac Albéniz, donde bailará y hará parte de las coreografías, compartiendo cartel con Antonio Canales, Manolo Sanlúcar y Chano Domínguez, entre otros. Con Saura ya trabajó antes en Salomé, que ganó un Goya y otros premios internacionales: "La cosa del cine es también muy dura, pero es otra forma de ver el proceso del baile". Todo 2004 ha sido para ella un año sin parar: "En realidad, ha sido una temporada de mucho trabajo, y el premio viene muy bien ahora. Con su dotación tendré los medios para empezar a pensar en una nueva producción para 2006. Por cierto, me iré a una larguísima gira a Japón, que es otro sitio donde aman de verdad la danza española".

Primera compañía

Aída Gómez obtuvo muy precoz sus matrículas de honor en el conservatorio de Madrid en las carreras de danza española y danza clásica, y su versatilidad y virtuosismo enseguida la hicieron destacar. Entró en las filas del Ballet Nacional de la mano de Antonio Ruiz Soler, y debutó en los papeles solistas de obras como Sonatas del padre Soler, Puerta de Tierra y Corpus, y bajo la dirección de María de Ávila ocupó ya oficialmente el puesto de primera bailarina. En la conmemoración del décimo aniversario de la creación del BNE, interpretó junto a Antonio Gades el papel principal de Bodas de sangre.

En 1990 llega uno de sus hitos profesionales, cuando baila en el teatro Kirov-Marinskii de San Petersburgo en la gran gala de la danza española, donde interpreta La Cachucha. En 1992, de nuevo en el teatro de la Zarzuela, baila Puerta de Tierra con José Antonio, dentro del espectáculo de Escuela Bolera. En 1997 participa en la inauguración del Teatro Real bailando la molinera de El sombrero de tres picos según la coreografía de Antonio Ruiz Soler. Su primera aventura como coreógrafa fue en 1997, cuando crea su primera compañía privada con la que estrena Solos en compañía.

Teresa Nieto, por su parte, declaró ayer: "Todavía no me lo creo. Es un premio que me alegra, en primer lugar por mis padres; es un premio para ellos, por su apoyo". Nieto comenzó a interesarse por la fusión entre danza española y danza contemporánea por casualidad, sin un plan específico y con un dúo para dos mujeres sobre la música de La vida breve (Falla): "Yo en aquella época no pensaba en nada de fusión. Encontré las danzas de Falla y fue la música que me motivó. Eso es todo. Lo hice sin premeditación".

La vida de Teresa Nieto ha quedado plasmada poéticamente en la delicada lírica de Tánger, su obra de 2000 con la que ha girado por muchos teatros y países. "Soy tangerina para todas las vidas. Estuve allí hasta los 18 años y en mi trabajo hay mucho de mi pasado, de toda mi vida allí: olores, sensaciones, colores. Llego a Tánger y me siento en casa". Nieto también es miembro fundadora de la compañía Bocanada, un verdadero crisol de coreógrafas y de donde han salido ella misma, la Ribot y Blanca Calvo, entre otras: "Ahora con el premio miro atrás, a aquel estreno en el Centro Cultural de la Villa que cambió nuestros destinos, que fue tan bien acogido. No podíamos imaginar el rumbo de nuestras carreras". Nieto acaba de estrenar Consuelo en Gijón, y estará en el teatro de La Abadía en el próximo Festival Madrid en Danza en la primavera de 2005.

El jurado de los nacionales de danza, dotado cada uno de ellos con con 30.050 euros, estuvo presidido por José Antonio Campos, director general del INAEM, y formado además por María Jiménez, José Antonio Ruiz, Sara Baras, Nacho Duato y Cristina Marinero.