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Todos los grupos, menos el PP, piden flexibilidad presupuestaria

El Partido Popular experimentó ayer de nuevo la soledad parlamentaria en la defensa y votación de una proposición no de ley que, en la práctica, pide al Gobierno pasar de la estabilidad a la flexibilidad presupuestaria. Es decir, pasar del déficit cero ante todo a una cultura en la que las Administraciones públicas puedan gastar más de lo que ingresan con dos excusas: el "ciclo económico" y las "decisiones autónomas" de las comunidades y las corporaciones locales. Todo ello con el compromiso de evitar la "injerencia" del Gobierno central en esos presupuestos territoriales.

El más explícito en su defensa de "poner fin ya al dogma, la hipocresía y la desconfianza hacia autonomías y ayuntamientos que es el déficit cero" fue el coordinador de IU, Gaspar Llamazares. "El anterior ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, dijo que iba a ser la ley del siglo XXI pero el dogma no ha durado ni tres años", se congratuló Llamazares.

El Gobierno, a través de su vicepresidente económico, Pedro Solbes, ha defendido la estabilidad presupuestaria, con el único matiz de adaptar esta exigencia al ciclo económico. Pero ayer, los diputados de los grupos nacionalistas enfatizaron la necesidad de que el Gobierno modifique la ley de Estabilidad Presupuestaria en línea con lo sugerido ayer en el Pleno para dar más libertad presupuestaria a los Ejecutivos autónomos.

Ayer, la proposición que pide más flexibilidad presupuestaria fue aprobada por 183 votos a favor y 133 en contra. Es decir, sólo votó en contra el PP.

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