Elorza cree que por razones políticas la incineradora acabará en San Sebastián

El alcalde donostiarra, el socialista Odón Elorza, dio ayer por hecho que la incineradora que dará servicio a toda Guipúzcoa, salvo la comarca de Txingudi, que tendrá su propia planta, terminará construyéndose en San Sebastián por razones políticas. "Quienes lideran el proceso de selección" de la localidad que acogerá la polémica infraestructura "han decidido en algún batzoki endiñársela a la capital guipuzcoana" debido quizá a que el primer edil es "socialista", sostuvo.

Elorza se mostró convencido de que el hecho de que San Sebastián tenga "todas las papeletas" para acoger la planta responde a "algún juego político" más que al "análisis de los parámetros objetivos que deben ser estudiados para elegir la mejor ubicación de una incineradora que nadie quiere". La incógnita se despejará el lunes, cuando los ocho ayuntamientos candidatos y las siete mancomunidades implicadas voten el emplazamiento definitivo entre los nueve preseleccionados.Odón Elorza afirmó que el proceso de selección de la localidad que albergará la planta que quemará las basuras de toda Guipúzcoa ha estado "muy mal liderado" por la Diputación, a la que recriminó no haber llevado a cabo una campaña de información "exhaustiva" para dar a conocer todo lo relacionado con una instalación de estas características. Una infraestructura que "ojalá no le toque" a San Sebastián, subrayó el alcalde, quien citó los problemas de falta de suelo que padece la ciudad para construir viviendas.

El primer edil donostiarra realizó estas declaraciones antes de la junta de portavoces en la que los grupos municipales expusieron sus posturas sobre la futura ubicación de la incineradora. El PSE-EE apuesta, "por razones técnicas", por construir la planta en Villabona, emplazamiento que en principio votará Elorza en la reunión del lunes. La coalición PNV-EA se mostró partidaria de colocar la planta en San Sebastián,Usurbil o Urnieta. El PP, por el contrario, no especificó una localidad, pero sí se manifestó en contra de que la capital guipuzcoana, dada sus escasez de suelo, acoja la instalación.

Populares y socialistas coincidieron en señalar que el lunes, antes de pasar a votar, sería necesario concretar aspectos tales como las posibles contraprestaciones que tendrá el municipio donde finalmente se ubique la incineradora provincial.

La Mancomunidad de San Marcos, a la que pertenece la capital guipuzcoana, también votará el lunes para que Villabona sea la localidad donde se instale la planta, según decidió su junta el pasado jueves. Este emplazamiento salió adelante con el respaldo del PSE-EE y la abstención del PP e IU. En las filas nacionalistas hubo división de opiniones. Román Sudupe, presidente de la Mancomunidad y portavoz del PNV-EA en el Consistorio donostiarra abogó por Urnieta, mientras que el resto apostó por San Sebastián.

Manifestación

El caso es que la resolución final se tomará pasado mañana, en una votación en la que participarán los presidentes de las siete mancomunidades afectadas y los alcaldes de San Sebastián, Urnieta, Beasain, Ormaiztegi, Villabona, Bergara, Zestoa y Usurbil, los ocho municipios que, en opinión de los técnicos, reúnen las mejores condiciones territoriales, ambientales y de comunicación para albergar la incineradora. La Diputación sólo intervendrá en caso de empate.

Mientras, la Coordinadora de plataformas contra la incineración se volverá a manifestar esta tarde, a partir de las 18.00 y desde el Boulevard, por las calles de San Sebastián para expresar su oposición a este sistema de tratamiento de las basuras. EB-Berdeak, Aralar y el sindicato agrario EHNE expresaron ayer su oposición a la planta, calificaron esta infraestructura de "no sostenible" y anunciaron su adhesión a la protesta de hoy.