El Gobierno ruso aumenta a más de 5.000 millones su demanda por evasión fiscal a la petrolera Yukos

El ministerio de Recaudaciones de Rusia, después de haber ganado el juicio por el que exigía a Yukos 99.400 millones de rublos (2.805 millones de euros) en concepto de impuestos y multas correspondientes al año 2000, reclama ahora otros 94.000 millones de rublos (2.650 millones de euros) a la petrolera por el año 2001, lo que pone a la compañía en una situación insostenible. La deuda de Yukos ante el fisco asciende así a unos 5.455 millones de euros. La bolsa reaccionó de inmediato en Moscú con una caída del 12,3% de las acciones de Yukos.

Las malas noticias para la que hasta el año pasado era la principal petrolera de Rusia llegan después de que surgieran esperanzas de que Yukos y el Gobierno podrían llegar a un acuerdo. El presidente Vladímir Putin manifestó que no está interesado en "una bancarrota de una compañía como Yukos" y la semana pasada el ministro de Finanzas, Alexéi Kudrin, confirmó que el Gobierno y la petrolera estaban negociando.

La nueva suma que reclama el ministerio de Recaudaciones también deberá ser objeto de un juicio, pero algunos observadores consideran que en Rusia el sistema judicial está lejos de ser independiente, sobre todo cuando se trata de casos tan sensibles como el de Yukos. La supervivencia de la petrolera está en manos del Gobierno

Kudrin explicó la semana pasada que lo que se busca es crear un precedente según el cual las compañías puedan ser declaradas culpables cuando evaden impuestos, incluso si para ello han utilizado "instrumentos legales". En esta línea, Putin se reunió ayer con los grandes empresarios del país para establecer un nuevo marco de relaciones entre el poder político y el mundo de los negocios. El tema de Yukos, sin embargo, no se trató en la reunión.