Montserrat Soto entra en la intimidad de los coleccionistas de arte

La artista Montserrat Soto busca las imágenes de los espacios y entornos del arte. En sus proyectos fotográficos ha estudiado los paisajes a través del viaje y los almacenes de los museos. Ahora prepara una reflexión sobre los lugares de archivos, pero antes ha presentado la exposición Paisaje secreto, en la Fundación Telefónica, de Madrid (Fuencarral, 3, http://www.fundacion.telefonica.com, hasta el 25 de julio), dentro del programa de PHotoEspaña.

Las 60 fotografías que forman el montaje recorren el paisaje secreto de las colecciones de arte contemporáneo, de los coleccionistas y los lugares privados de contemplación de las obras. Montserrat Soto ha visitado en los últimos cinco años las viviendas de coleccionistas de América del norte y del sur y de Europa (de España hay tres, no identificadas), en una difícil labor de acercamiento, a través de relaciones personales, y de autorización para que sea pública una dedicación y contemplación privadas.

"El proyecto era pedir a los coleccionistas que me dejaran fotografiar sus casas con las colecciones de arte contemporáneo, los lugares donde las guardan y donde las enseñan", declara Montserrat Soto. "Quería buscar las relaciones de las obras de arte y el entorno donde están ocultas, observar el arte y los coleccionistas a través de sus colecciones, y estudiar algunos comportamientos, como los intereses por coleccionar, que pueden ser de índole histórica, social, sexual o económica".

Las fotografías en color, de grandes formatos, se enmarcan como puertas o ventanas para que el espectador participe de la visión como un mirón, según la artista, y se acerque a la privacidad de los coleccionistas, que nunca aparecen en las imágenes. "Me interesa también conocer el lugar de las obras de arte que después van a estar en los museos, como el destino natural de las colecciones que después se prestan, venden o depositan. Mi pretensión era llegar a la intimidad del coleccionista a través de sus obras antes de que aparezcan en público".

La artista quiere reflejar en sus imágenes el momento en que se esconde la obra y cómo se esconde, por lo que ha llamado a su trabajo Paisaje secreto, realizado a través de fotografías compuestas como "instalaciones con objetos encontrados o buscados", para sacar el entorno y la "magia" de la colección. Lo que está detrás de las puertas y ventanas funciona como una invitación al visitante desde un lugar de escondite. También puede identificar las piezas de arte actual, que en muchos casos incluye otras obras de diseño en mobiliario, lámparas y alfombras, y tratar de descubrir si la colección está en México, Venezuela, Nueva York o España. "Las casas donde viven aparecen como una instalación efímera, como una obra de arte formada con los espacios personales".

El catálogo reproduce las fotografías expuestas sin los marcos de puertas y ventanas tal como aparecen en las secuencias de la exposición en los dos espacios de las salas. Contiene un estudio de Nico Israel sobre Soto y los lugares donde habita el arte contemporáneo, y entrevistas con el coleccionista Ignacio Enrique Oberto, de Venezuela, y con la galerista Helga de Alvear sobre el coleccionismo. Soto ha presentado sus trabajos en los últimos años en las ferias de Basilea y Berlín, en la colectiva de autores españoles Big Sur, en Berlín, en Los límites de la percepci

ón, en la Fundación Joan Miró, de Barcelona, en las galerías Helga de Alvear y Koldo Michelena y en el centro CGAC de Santiago de Compostela.

En otras salas de la Fundación Telefónica, y dentro de PHotoEspaña 2004, se muestra la primera retrospectiva europea del fotógrafo Paul Graham, con piezas de sus series sobre la nueva Europa, con imágenes de España, el conflicto de Irlanda y aspectos sociales de Estados Unidos.