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Análisis:ESTA SEMANA
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

Magdalena Álvarez, presente en Andalucía

Ha querido el destino que, en los últimos días, la imagen de la anterior consejera de Economía y Hacienda y en la actualidad ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, se proyecte sobre Andalucía con nitidez y contundencia. El gesto de su sucesor, José Antonio Griñán, regalándole la pluma con la que se firmó el pasado jueves en Madrid el acuerdo que saldaba el conflicto sobre la liquidación autonómica la situó, de golpe, en el centro de la escena. De esa forma, el Gobierno andaluz reconocía su larga lucha en este contencioso. En este tiempo ha tenido sonados enfrentamientos con los populares. El último: el PP denunció, infructuosamente, ante la Junta Electoral Central, el regalo de la pluma utilizada en la firma por considerarlo "electoralista". Álvarez propició así, sin quererlo, otro patinazo de sus viejos contrincantes.

Pero no ha sido la única ocasión en la que la trayectoria de Álvarez sale a colación en el debate político andaluz. Hubo un tiempo en el que se generó una fuerte polémica al asegurar que la fusión de las cajas El Monte de Huelva y Sevilla y San Fernando era técnicamente inviable. Con sus palabras ponía en entredicho la propuesta de su partido e incluso del Gobierno andaluz, que habían hecho una apuesta clara a favor de la fusión. Hay quien vio en ese desmarque intenciones ocultas de la consejera para favorecer los intereses de la entidad malagueña Unicaja. Cuando así se pronunció, decía que era porque tenía datos que la hacían llegar a esa conclusión desaconsejando tal operación de integración de las cajas sevillanas, ambas caracterizadas, entonces y ahora, por el alto riesgo que habían asumido en el sector inmobiliario. Aquello le costó un serio disgusto. El PSOE remachó su intención de llevar a cabo esta iniciativa y nadie osó levantar la voz en contra de la misma, a pesar de que de puertas adentro hay más de un alto dirigente de estas cajas a quien le apetece llevar a cabo otro tipo de fusión.

Irrumpe Pastrana

Así estábamos hasta la irrupción del secretario general de la UGT Andalucía, Manuel Pastrana. Dice ahora que esa fusión entre El Monte y San Fernando no es conveniente ni viable, asumiendo así las tesis ya olvidadas de la que fuera consejera. Es más, apuesta por la paralización del proceso ya en marcha porque considera que no merece la pena. Eso sí, no dice cuál es su alternativa. Su aparición en este momento sorprende, máxime si se tiene cuenta su silencio cuando Álvarez manejó estos mismos argumentos. Tal vez, como advierte CC OO, todo obedezca al temor que tiene el sindicato ugetista de ver difuminada su presencia en la entidad resultante. En cualquier caso, este tipo de pronunciamientos son propiciados por la atonía en la que se desarrolla la fusión de ambas cajas. A sus respectivos presidentes, José María Bueno Lidón y Alfredo Pérez Cano, parece que se los ha tragado la tierra. Más banqueros que nunca, olvidan el respaldo político que les ha llevado donde están y que está auspiciado por un objetivo prioritario y básico: la fusión de las dos cajas. Algo tienen que haber visto para que este proceso no haya entrado en la velocidad de crucero necesaria una vez renovados sus órganos de gobierno.

En el PSOE deberían estar atentos a la jugada porque en otra ocasión comprobaron cómo les robaban la cartera y sus deseos se vieron truncados por los de aquellos que designaban para estar al frente de las cajas. Así ocurrió con las de Cádiz y Jerez. A pesar de los pronunciamientos oficiales del partido y de la misma Junta a favor de la fusión, un hábil Braulio Medel supo aprovechar la rendija que encontró entre los socialistas gaditanos para colar la fusión de la caja de Cádiz con la de Ronda, Antequera, Málaga y Almería, dando pie así a una de las cajas más importantes del país, Unicaja, aunque éste no era el proceso que tenían planificado en el PSOE.

Los socialistas ya han aprendido la lección, pero eso no quita que puedan tropezar en la misma piedra dado el sospechoso parón en el que está la fusión de las cajas sevillanas. Por si acaso, en esta semana, Bueno y Pérez recibirán nuevos mensajes de sus superiores para que se atengan al guión establecido y descarten otras tentaciones.

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