La Feria del Libro entrega su Pluma de Oro al académico Arana Martija

La Feria del Libro de Bilbao distinguió ayer con su Pluma de Oro la trayectoria del académico de la lengua vasca José Antonio Arana Martija (Gernika, 1931), bibliotecario de Euskaltzaindia, escritor e investigador especializado en bibliografía. Su compañero de Euskaltzaindia Henrike Knörr recordó su "amor sin límites a los libros" y su caracter de "fino investigador" y "elegante escritor". Su hija Cristina recogió el premio.

Arana Martija tuvo que dejar su puesto como tesorero de Euskaltzaindia, que también ocupaba, el pasado diciembre, tras 15 años en el cargo, debido a su delicado estado de salud. Por este mismo motivo ayer no pudo acudir al paseo del Arenal, donde la Feria del Libro le entregó su premio Pluma de Oro, que reconoce la trayectoria de personalidades vinculadas al mundo del libro.

Su hija Cristina agradeció la distinción en nombre del euskaltzain. En la presentación del galardón, el tambien miembro de Euskaltzaindia Henrike Knörr recordó la doble dedicación de Arana Martija como escritor e investigador, tanto en euskera como en castellano, en múltiples cuestiones relacionadas con la lengua, la bibliografía, la historia o el folclor. Knörr calificó a su compañero como un "fino investigador y "elegante escritor", que se ha preocupado al extremo por cada detalle de sus textos.

Arana ha dedicado la mayor parte de su vida al estudio de los libros desde diferentes responsabilidades, movido, recalcó Knörr, por "un amor sin límites a los libros" que le inculcó en el seminario de Gernika su profesor Andrés de Mañarikua, y por su "permanente obsesión por reunir el patrimonio cultural vasco".

El galardonado ha sido seguidor y biógrafo de Resurección María de Azkue y lector de Miguel de Unamuno, "en quien encuentra tantos motivos de reflexión", destacó Knörr.

El euskaltzain es autor de una veintena de obras y numerosos artículos, en su mayoría relacionados con la lengua, la música y la cultura vascas.

Desde 1988

Académico de número de Euskaltzaindia desde 1988, Arana Martija comenzó su relación con la Academia vasca diez años antes, cuando fue contratado para el puesto de subbibliotecario y responsable de la Biblioteca Azkue, lo que le permitió especializarse en bibliografía.

En Euskaltzaindia ha sido, además de bibliotecario, miembro de la Junta de Gobierno y tesorero. En la actualidad es también miembro de la comisión de publicaciones y de la encargada de asuntos económicos y jurídicos.

Arana Martija comenzó sus estudios en la ikastola de Gernika y los continuó durante su exilio en territorio francés. Hasta los nueve años no aprendió a hablar castellano. En el seminario de Gernika estudió Humanidades y, posteriormente, cursó la licenciatura de Derecho en las universidades de Deusto y Valladolid. En 1957, comenzó la carrera de Ciencias Económicas en la facultad de Bilbao.

Antes de comenzar su etapa profesional en Euskaltzaindia, trabajó en Formica Española y Astra, empleo que perdió en 1963 al ser encarcelado por motivos políticos, y en otras empresas sin relación con el mundo de la bibliografía.