El 75% de los espacios públicos 'libres de humo' incumple la ley antitabaco

La prohibición de fumar se incumple en tres de cada cuatro "espacios sin humo", según ha calculado la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) tras visitar 97 hospitales, institutos de enseñanza media, centros administrativos, casas de cultura y de juventud, centros comerciales, estaciones de transportes y universidades de 12 ciudades. Con ocasión del Día Mundial sin Tabaco, el Ministerio de Sanidad recuerda que el año pasado murieron en España más de 55.000 personas por culpa del hábito de fumar, primera causa evitable de muerte, enfermedad e invalidez.

El estudio de la OCU pinta un panorama desolador sobre la utilidad de la legislación antitabaco en España. Sólo en 11 de los 97 espacios visitados, y pese a la obligación legal, se hallaron lugares reservados para fumadores debidamente señalizados, y de ellos sólo tres disponían de un sistema de ventilación capaz de impedir que el humo se propagara por todo el resto de la atmósfera del local.

En 48 de los "espacios sin humo" no sólo se fuma, sino que se vende tabaco en máquinas expendedoras, sin ningún control que impida a los menores comprar un paquete. Los jóvenes también pueden adquirir tabaco "en bares y estancos cercanos a los centros de enseñanza", y hasta en papelerías que venden cigarrillos sueltos, según el informe.

"¿De qué sirve prohibir la venta de tabaco a menores si en los lugares que ellos frecuentan hay máquinas expendedoras sin control y a las que pueden acceder sin problema?", se pregunta el director general de la OCU, José María Múgica. "¿De qué sirve declarar espacios sin humo si están llenos de gente fumando? ¿De qué sirve declarar zonas reservadas si no se aíslan debidamente? ¿De qué sirven iniciativas como las del Plan de Control y Prevención del Tabaquismo si se siguen subvencionando los cultivos de tabaco?

Empezar a los trece años

En España fuma el 34,4% de la población mayor de 15 años, según la última Encuesta Nacional de Salud, con datos de 2001. El porcentaje refleja una tendencia a la baja desde 1987, cuando fumaba el 38,4% de los mayores de 15 años, pero en el mismo periodo la edad media para empezar a fumar se redujo de los 13,8 a los 13,1 años de edad.

La ministra de Sanidad, Elena Salgado, anunció el viernes que el Plan Nacional de Prevención del Tabaquismo, un proyecto "excesivamente voluntarista" del anterior Gobierno, será revisado en colaboración con las comunidades autónomas porque, a juicio de la ministra, "no contaba con la financiación adecuada". La ministra reconoció que "a corto plazo" no se prevé un aumento del impuesto sobre el tabaco ni la financiación pública de tratamientos médicos para dejar de fumar. La prohibición de fumar en los lugares de trabajo, como en Nueva York o Irlanda, llegará mediante "pasos intermedios". Salgado apoya la actitud de "buscar normas que tienen que ser asumibles por la sociedad".

El Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos calculó ayer que una reducción de 10 puntos en el tabaquismo traería consigo un ahorro equivalente al 0,18% del producto interior bruto (PIB), lo que equivale a unos 30.000 millones de euros.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha organizado este año su campaña bajo el lema Tabaco y pobreza: un círculo vicioso. Las personas más pobres y con menor nivel de instrucción son las que fuman más, y la OMS resalta el enorme coste que el consumo y el cultivo de tabaco entrañan para las familias pobres y los países en desarrollo. La campaña cuestiona los supuestos beneficios económicos del tabaco