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Una de cada cuatro jóvenes surafricanas está infectada con el virus del sida

Un tercio de las mujeres afirman que fueron forzadas a su primera relación sexual

Suráfrica es el país del mundo más afectado por el sida, con 5 de sus 45 millones de habitantes infectados por el virus. Un estudio de la Universidad de Witwatersrand ha determinado ahora que casi una de cada cuatro mujeres de entre 20 y 24 años está infectada. El nivel de infección es mucho menor entre los hombres de la misma edad, con un contagiado por cada 14 varones. Un tercio de las mujeres jóvenes que han tenido relaciones sexuales afirman que fueron forzadas a su primera relación por un hombre que, de promedio, era cuatro años mayor que ellas.

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La cifra de seropositivos jóvenes se ha estabilizado alrededor del 10% (sumando ambos sexos). Pero entre ellos, el 77% son mujeres, según los investigadores dirigidos por Helen Rees, de la Universidad de Witwatersrand, en Johanesburgo. El estudio se basa en una muestra de 12.000 surafricanos jóvenes.

Los datos confirman que el nivel de infección se ha estabilizado en los jóvenes (entre 15 y 24 años). "Pero sería ingenuo pensar que esto es motivo de celebración", dice Rees en un comunicado. "El nivel de infección entre los jóvenes surafricanos, y especialmente entre las mujeres jóvenes, está entre los más altos del mundo, y hay tendencias de comportamiento, como la multiplicidad de parejas sexuales, que acentúan el problema".

Según los resultados del estudio, las mujeres jóvenes tienen más relaciones sexuales que los hombres del mismo grupo de edad. Esto quiere decir que un número relativamente reducido de hombres acapara la mayor parte de las relaciones. En estas condiciones, un pequeño número de hombres seropositivos puede contagiar de sida a un alto número de mujeres.

La desinformación de los jóvenes surafricanos en relación con el sida es alarmante. Entre la muestra de 12.000 jóvenes, dos tercios reconocen que no usan condones de manera sistemática. Y el 62% de los seropositivos de la muestra creen que ello no implica ningún riesgo de contagio, o que el riesgo es bastante pequeño.

El 25% de los encuestados afirma conocer a algún infectado con el VIH, y el 45% dice conocer a alguien que ha muerto por esa causa.

Tras varios años sosteniendo teorías extravagantes, como que la causa del sida no es el VIH, el presidente surafricano, Thabo Mbeki, ha empezado este mismo mes -dos años después de que una sentencia le obligase a ello- a aplicar un programa de suministro de fármacos antisida en los hospitales públicos del país. Unos 50.000 pacientes (el 1% de las personas infectadas) estarán medicados a finales de este año, según los cálculos oficiales.

En febrero pasado, Mbeki aseguró que Suráfrica no disponía de estadísticas fiables sobre las tasas de infección con el VIH. La presión internacional logró en 2003 que el Gobierno accediera a suministrar medicamentos antirretrovirales (los fármacos que han logrado convertir el sida en una enfermedad crónica en los países ricos) a los hospitales públicos.

Sin embargo, los partidos de la oposición han vinculado el lanzamiento de ese programa con la proximidad de las elecciones generales, convocadas para el próximo día 14. La ONG Treatment Action Campaign (TAC), cuyas iniciativas han resultado esenciales para posibilitar la dispensación de fármacos, había amenazado con una campaña agresiva si el presidente Mbeki no accedía a llevar adelante el plan.

La oposición y las ONG sospechan que la resistencia del presidente surafricano a la utilización en el país de los fármacos antisida tiene relación con el miedo a una catástrofe presupuestaria.

Cada día mueren de sida 600 surafricanos, y 70.000 bebés se infectan cada año por la transmisión de madre a hijo. Con todo, las mujeres jóvenes se están llevando la peor parte de la desastrosa epidemia. Las muertes de mujeres entre 20 y 49 años se han triplicado entre 1998 y 2003.

La joven surafricana Petunia Moleboheng agonizaba en su cama hace un año, consolada por su madre.
La joven surafricana Petunia Moleboheng agonizaba en su cama hace un año, consolada por su madre.ASSOCIATED PRESS

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