Intelectuales en favor de Edgar Morin

Un amplio número de intelectuales firman un manifiesto en favor del pensador francés Edgar Morin, quien conjuntamente con Sami Naïr y Danielle Sallenave publicó en 2002 en Le Monde un artículo sobre el conflicto palestino-israelí bajo el título Israel-Palestina: el cáncer, y que ha sido llevado ante los tribunales por la Association France-Israël. "El informe de la audiencia celebrada el 17 de marzo", señala el manifiesto, "no reproduce en qué contexto se hacen las acusaciones de racismo y apología del terrorismo que los demandantes atribuyen al filósofo francés. Morin afirma que 'la lógica de desprecio y humillación no es propia de los israelíes, sino de todas las ocupaciones'. Todo, en el artículo, indica que la crítica de la ocupación y de la represión carece de carácter racista y que la acusación de racismo es grotesca. Por otra parte, transformar en apología del terrorismo un esfuerzo de entender lo que ha llevado a unos jóvenes a convertirse en kamikazes, significa intentar impedir toda explicación y toda comprensión".

"Acusar a Edgar Morin de antisemitismo y de racismo es doblemente escandaloso", añade el documento. "En primer lugar, porque Edgar Morin ha dado testimonio muchas veces de su identidad judía, especialmente en su libro Vidal y los suyos, en el que narra la historia de su padre, de su familia, que, tras ser expulsados de España, llegan finalmente a Salónica, de donde la mayoría de ellos fueron deportados durante la Segunda Guerra Mundial. En segundo lugar, porque las críticas que hace de la política de Israel, compartidas por gran número de europeos, son de naturaleza humanista. Mientras EE UU defiende incondicionalmente la política de Sharon, la opinión pública europea es cada vez más sensible al sufrimiento de los palestinos, víctimas de una dominación que recurre a todos los medios para impedir que tengan su propio Estado. Cuestionar el actual Gobierno de Israel, e incluso a la mayoría de los israelíes que lo apoyan, no tiene nada que ver con condenar a los judíos".

Los hasta ahora 156 firmantes del manifiesto no dudan en señalar que el juicio a Morin, como los ataques contra Alfred Grosser, Daniel Mermet, Rony Brauman y otros intelectuales, pone de manifiesto las graves amenazas que pesan en Francia sobre la libertad de pensamiento. Firman el texto, entre otros, Laure Adler, Jean Baudrillard, André Burguière, Juan Luis Cebrián, Mauro Ceruti, Régis Debray, Federico Mayor, Raúl Morodo, Pierre Nora, René Passet, Alessandro Pizzorno, Paul Ricoeur, Jacques Robin, José Luis Sampedro, Mario Soares, Paul Thibaud, Alain Touraine, Nelson Vallejo-Gómez, Gianni Vattimo, José Vidal-Beneyto, Pierre Vidal-Naquet, Georges Vigarello y Paul Virilio.