El Gobierno aprueba el túnel de Bracons con los votos en contra de Esquerra e Iniciativa
Mas destaca las contradicciones del tripartito e invita a los disidentes a abandonarlo
Pese a la oposición de ERC e ICV, el Gobierno catalán acordó ayer la reanudación de las obras del polémico eje viario Vic-Olot, incluidos los trabajos de perforación del túnel de Bracons. Finalmente, el tripartito ha desencallado el proyecto, aunque el Consell Executiu de la Generalitat, que por primera vez se reunió ayer en Tarragona, acordó la modificación de varios aspectos del proyecto para reducir el impacto visual y medioambiental de la obra, según explicó ayer el consejero de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Joaquim Nadal. La decisión se tomó de forma colegiada y es asumida por todo el Gobierno, pero topó con la oposición de los consejeros de ICV y ERC. Sus respectivos grupos parlamentarios también manifestaron su rechazo al túnel.
Las modificaciones en el eje Vic-Olot suponen un encarecimiento de las obras de 10 millones de euros
Transportes Metropolitanos se encargará de realizar la asistencia técnica de los trenes de la línea 9
El Gobierno abre expediente a ex dirigentes de Ferrocarrils por la constitución de un plan de pensiones para los directivos
La carretera Vic-Olot será más estrecha de lo que establecía el proyecto de CiU y tendrá un máximo de tres carriles, lo que constituye una de las medidas correctoras que según el portavoz, Joaquim Nadal, garantizan el mínimo impacto medioambiental. De esta forma, el eje viario no tendrá el aspecto de una autovía en ninguno de sus tramos. Otra de las modificaciones aprobadas ayer fue la prolongación del falso túnel de Sant Andreu de la Vola en 500 metros y, en la boca norte del túnel del valle de En Bas, variar los primeros 500 metros y aplicar en el tramo restante hasta Sant Esteve medidas de protección del entorno que incluirán la cobertura por túneles y falsos túneles de más tramos de lo previsto inicialmente. Así, señaló Nadal, se reducirá el volumen de la tierra removida, con lo que el impacto visual de la obra será menor.
Cambios en el túnel
Nadal aseguró que el eje Vic-Olot finaliza en la variante de Sant Esteve d'en Bas y que su continuación hasta Olot "debe garantizarse con las variantes de Les Preses y de Olot de la C-63", de tal forma que estas nuevas vías no afecten a los cultivos ni a la zona volcánica. Paralelamente a la modificación de las obras, el Gobierno encargó ayer a Política Territorial la redacción inmediata de los planes directores de los valles de Ges y de En Bas, documentos que deberán fijar las zonas de estos parajes que quedarán protegidas. En cuanto al polémico túnel, Nadal informó ayer de que han quedado modificadas su pendiente, que será menor, y su orientación, de forma que la salida norte se sitúe en una cota de menor altitud que permita luego un recorrido de la carretera "de menor impacto". Las modificaciones aprobadas representan un incremento de 10 millones de euros sobre el coste inicial de la obra.
El consejero de Medio Ambiente, Salvador Milà, valoró que el acuerdo recoja la obligación de declaraciones de impacto ambiental, como sostenía su departamento. El líder de CiU, Artur Mas, en cambio, se mostró crítico tanto con los cambios efectuados, ya que, dijo, empeoran el proyecto y hacen la carretera menos segura, como con las discrepancias. En su opinión, son una muestra del caos que impera en el tripartitoEl Gobierno catalán tomo ayer otras decisiones signigicativas. Así, determinó conceder a la empresa que realiza el túnel de la línea 9 en Santa Coloma las obras del tramo del triángulo ferroviario de la Sagrera. El motivo es que se necesita una tuneladora que la firma ya tiene porque está empleándola en el túnel hasta la Sagrera. Asimismo, se decidió conceder la asistencia técnica de los trenes de la línea 9 a Transportes Metropolitanos (Metro), lo que en cierta medida prefigura que será también la empresa elegida para realizar el servicio.
Por otra parte, el Consell Executiu de la Generalitat decidió ayer abrir un expediente a varios directivos de Ferrocarrils de la Generalitat para esclarecer si hubo "uso indebido de recursos públicos por parte de algún directivo de esta empresa pública". Nadal se refirió explícitamente a los directivos que "tenían responsabilidades en los planes de pensiones" e informó de que la Generalitat ha nombrado ya un instructor para el caso.
La decisión sobre Bracons fue mal acogida por la plataforma ecologista Salvem les Valls, que calificó la decisión de "autoritaria y contraria al territorio". La Cámara de Comercio de Girona, en cambio, celebró la continuación de las obras destacando el "impacto económico" y la "rentabilidad social" de la nueva vía. Raül Valls, portavoz de los ecologistas, aseguró que el movimiento contrario al trazado se siente enormemente triste y decepcionado con el tripartito. El portavoz ecologista está convencido de que la decisión estaba tomada y de que durante este tiempo se ha llevado a cabo una operación de maquillaje. Salvem les Valls recordó que el "blindaje urbanístico" del entorno de la carretera no supone una novedad, puesto que ya había sido aceptado por el anterior Gobierno, informa Gerard Bagué.
El colectivo Salvem les Valls, a pesar del duro golpe que representa para su lucha la decisión, no se da por vencido y ha convocado para mañana concentraciones ante el Ayuntamiento de Olot y el de Girona, y ante el Palau de la Generalitat. También sigue abierta la vía judicial, aunque la resolución puede llegar con la carretera lista. La Cámara de Comercio de Girona, mostrando una implicación que no es habitual en otras polémicas urbanísticas, valoró ayer la continuidad de la construcción del eje.
También en Vic hubo alegría por la decisión: "Siempre hemos defendido una vía fácil, ágil y directa que beneficie las comunicaciones entre Osona y la Garrotxa, y también con las comarcas centrales", dijo Joan Rovira, presidente del Consejo de Empresarios de Osona, quién no ocultó sus dudas ante el proyecto del nuevo Gobierno y añadió que "existe el peligro de que el Vic-Olot sea un nuevo Eix Transversal". Rovira cree que la solución para evitar que el eje Vic-Olot se convierta, como ya pasa en la C-25, en la alternativa de los transportistas que hacen rutas europeas es "levantar los peajes de la AP-7", informa Eva Clota.
En cierta medida contrariado se mostró el presidente del Consejo Comarcal de Osona, Jaume Mas (ERC), quien defendía el anterior proyecto, más ambicioso, en pro de la seguridad de los conductores y cree que una carretera de tres carriles sin medianas es un peligro. El alcalde de Sant Pere de Torelló, Jordi Fàbrega, que había pedido la paralización de las obras en Sant Andreu de la Vola, se mostró satisfecho de que el tripartito haya atendido gran parte de sus reivindicaciones.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Consejerías autonómicas
- TMB
- Salvador Milà
- Consejo administración
- VII Legislatura Cataluña
- FGC
- Joaquim Nadal
- Consejo de Gobierno
- Generalitat Cataluña
- Parlamentos autonómicos
- Cataluña
- Transporte urbano
- Gobierno autonómico
- Empleo
- Parlamento
- Política autonómica
- Comunidades autónomas
- Administración autonómica
- Proceso judicial
- Transporte
- Empresas
- Economía
- Justicia
- España
- Administración pública