La OMS y la ONU denuncian las desigualdades entre sexos en la lucha contra el sida

Las mujeres representan ya el 50% de los nuevos casos de sida en el mundo, según datos de la agencia de la ONU para la enfermedad (Onusida), un porcentaje que duplica el de hace 20 años.

Entre las causas de este aumento figuran la

menor información de las mujeres y sus dificultades de acceso a los sistemas sanitarios, según dijo ayer el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Lee Jong-wook.

Pero hay otras causas. Una de ellas es que entre una quinta parte y la mitad de las menores son forzadas en su primera relación sexual, en parte por las creencias en ciertas partes del África subsahariana de que las vírgenes inmunizan contra la enfermedad, y en parte porque mientras más jóvenes sean, más difícil es que estén infectadas. Además, muchas mujeres no están en disposición de negociar el uso del preservativo (la protección más eficaz) con su pareja, y el desarrollo de otros sistemas de protección, como los microbicidas (cremas o geles vaginales que impiden el paso del virus), es todavía incipiente.

A esta vulnerabilidad social se suma la biológica. Onusida calcula que es dos veces más probable que una mujer contraiga el VIH de una pareja masculina infectada que al revés. En los países del África subsahariana, la proporción de mujeres de entre 15 y 24 años es 2,5 veces la de hombres de la misma edad.

El sida no es sólo un problema de salud. La ONU calcula que en los hogares pobres donde hay un enfermo de sida, el paciente llega a absorber la tercera parte del tiempo dedicado a las labores del hogar (una tarea que realizan esposas, madres, hermanas o hijas). En África, ello supone que las niñas dejan la escuela para ayudar en casa.

"Millones de mujeres en el mundo ya estaban abocadas a trabajar duramente de por vida. Ahora, el sida se ha sumado a ello convirtiéndose en una sentencia de muerte", remachó ayer el director de Onusida, Peter Piot.