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LA PRECAMPAÑA DEL 14-M

Zapatero desafía a Rajoy a celebrar un debate cara a cara y el PP lo rechaza por inviable

El candidato socialista argumenta que "en democracia no se interpela de lejos, sino de cerca"

José Luis Rodríguez Zapatero retó ayer a su principal rival electoral, Mariano Rajoy, a realizar un debate cara a cara en televisión, para que los ciudadanos puedan comparar sus propuestas políticas. Desde 1993 no se ha producido una confrontación de esas características, al haber sido rechazada siempre por el PP, que no quiere correr riesgos. El secretario general del PSOE desafió varias veces a su oponente durante un mitin celebrado en Cuenca y sostuvo que Rajoy debe "mojarse" si quiere ganar las elecciones. El PP descarta ese cara a cara en televisión con el argumento de que la Junta Electoral los rechaza.

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Como sucede en casi todos los mítines, donde los políticos hablan como si tuvieran a sus rivales delante, el secretario general del PSOE estaba comentando en el Auditorio de Cuenca unas críticas que Rajoy le había hecho el día anterior en León. Recordó que éste le había dirigido varias preguntas sobre el modelo de Estado que propone el PSOE. Con cierta solemnidad, Zapatero lanzó un reto al líder del PP: "En democracia no se interpela de lejos; en democracia se interpela de cerca, así que vamos a un debate, señor Rajoy. Ésa es la esencia de la democracia".

Los socialistas, y especialmente su secretario de Organización, José Blanco, colocan la necesidad de los debates en el primer plano siempre que pueden, aunque hasta ahora su líder no había sido tan tajante y tan desafiante. El ex presidente Felipe González rehusó los debates desde 1982 hasta 1993, cuando las encuestas le eran adversas y aceptó enfrentarse con Aznar en televisión.

Para negarse a celebrar un cara a cara entre Rajoy y Zapatero,el PP esgrime la decisión de la Junta Electoral de "amparar la petición de participar en debates de todas las fuerzas parlamentarias que lo pidan". El portavoz del PP, Rafael Hernando, lo explica con estos términos: "Hemos recibido una petición del PSOE para celebrar un debate a dos, de Izquierda Unida para que sea a tres y de CiU para hacerlo a cinco. Nosotros estamos abiertos a todo pero sin enfadar a nadie". Según este portavoz, además, "Zapatero sólo busca los debates como un escondite para tapar sus carencias, para disimular que cada día presenta una propuesta contradictoria con la del día anterior".

El PP, añade Hernando, teme además que "la promesa de Zapatero de no intentar ser investido presidente salvo que sea más votado que Rajoy puede llevar al PSOE a buscar un Gobierno a la cántabra". Eso significaría "que el PSOE apoyaría a cualquiera otra de las formaciones con las que mantiene pactos si el PP no obtiene una mayoría suficiente".

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El mitin socialista de Cuenca, convocado oficialmente para hacer la presentación de los candidatos al Congreso y al Senado por la Comunidad de Castilla-La Mancha, pretendía también ofrecer una imagen de unidad entre Zapatero y José Bono. El presidente castellano-manchego ha protagonizado -al igual que el presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra- algunos encontronazos recientes con la dirección del PSOE. Zapatero y Bono se deshicieron en elogios mutuos. "Más que un notable [en alusión a su inclusión en un comité asesor] a Bono habría que darle una matrícula de honor por su comportamiento", dijo Zapatero. "Siento la complacencia de la lealtad", había asegurado antes Bono.

Sus discursos, llenos de referencias al "patriotismo" del PSOE, fueron muy diferentes de tono. Mientras Bono hizo frecuentes referencias a los caciques vencidos-"a veces da la impresión de que Franco no se ha muerto", dijo en alusión a Fraga-, al analfabetismo superado y a las mejoras respecto a los tiempos de Indalecio Prieto, Zapatero desgranó sus propuestas electorales, si bien no entusiasmó tanto al público como su telonero.

El líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, y José Bono, presidente de Castilla-La Mancha, entre otros dirigentes socialistas, ayer, en Cuenca.
El líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, y José Bono, presidente de Castilla-La Mancha, entre otros dirigentes socialistas, ayer, en Cuenca.RICARDO GUTIÉRREZ

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