_
_
_
_
NEGOCIACIONES PARA FORMAR GOBIERNO EN CATALUÑA

CiU acepta negociar un Gobierno tripartito con Esquerra y socialistas

Carod Rovira se muestra escéptico sobre un pacto de coalición con Convergència i Unió

Convergència i Unió (CiU) no cerró ayer la puerta a la formación de un Gobierno tripartito en Cataluña, junto a Esquerra Republicana (ERC) y el Partit dels Socialistes (PSC), pero lo supeditó a que sea Artur Mas quien lo encabece. Los nacionalistas marcaron así la primera y fundamental diferencia con los socialistas de Pasqual Maragall, que el lunes rechazaron este Gobierno de concentración, tal como piden los independentistas. CiU también aceptó las otras dos condiciones de ERC: incrementar los mecanismos anticorrupción y defender en Madrid lo aprobado en el Parlamento catalán.

Más información
"En este Gobierno no hay corrupción"
Creada una plataforma para exigir un Ejecutivo de izquierdas
Zapatero reprocha a Aznar haber llegado a La Moncloa "de la mano de Arzalluz"
Aznar y Rajoy advierten a PSOE y CiU del coste de pactar con ERC
La doble llave
Aznar dice que hay "preocupación" en la sociedad por un posible Gobierno catalán con Esquerra

El PSC aceptó el lunes dos de los tres requisitos de los independentistas de Josep Lluís Carod Rovira. Ayer, CiU dijo sí a los tres, en la primera reunión que mantuvo con Esquerra para la formación de un Gobierno en Cataluña. Los convergentes incluso aceptaron la repetida propuesta de ERC de configurar un Gobierno de concentración nacional. "Por nosotros no quedará", repitió hasta tres veces el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida. Una diferencia que también se apresuró a destacar públicamente el negociador de ERC, el diputado Joan Puigcercós.

A pesar de la predisposición convergente, Duran precisó que su prioridad es un Ejecutivo de tinte nacionalista pues, a su juicio, ese fue el mandato de las urnas el 16-N y agregó que un acuerdo con Esquerra es previo a la incorporación de los socialistas.

Los convergentes ofrecieron a Esquerra un pacto "global" que incluye el programa de gobierno, la configuración de la mesa del Parlamento y el reparto de consejerías en el nuevo Ejecutivo. Es decir, para CiU todo es negociable menos la presidencia de la Generalitat, que debería recaer en Artur Mas, al ser la formación que obtuvo más diputados. CiU le puso fecha a la firma del pacto: antes del viernes 5 de diciembre, día en que debe constituirse la Cámara catalana.

Tampoco hubo dificultades en aceptar la "lealtad" -tal como la definen los republicanos- entre Cataluña y Madrid. O sea, que los diputados de CiU en el Congreso y en Europa defiendan siempre los acuerdos que tome el Gobierno catalán y el Parlamento. Duran Lleida se mostró un tanto irónico en su comentario: "CiU siempre ha defendido en Madrid lo que ha aprobado el Gobierno, porque hasta ahora el Gobierno siempre ha estado formado por CiU. Y si continuamos en el Gobierno, por supuesto que no hay ningún problema para aceptar esta condición".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Los republicanos insistieron sobre todo en arrancar de CiU un compromiso en firme que descarte un futuro pacto con el PP, en caso de que Mariano Rajoy gane las elecciones legislativas de marzo. "Una cosa es negociar, que inevitablemente hay que negociar y la otra es pactar", subrayó Puigcercós. ¿Qué se entiende por pactar?, se le preguntó. El diputado republicano incluyó un voto a favor de la investidura de Rajoy o de los presupuestos generales o disponer de ministros. "Al PP ni agua ya nos ha crucificado bastante", remachó el vicesecretario de ERC, Ernest Benach. Duran precisó que CiU ya ha roto sus relaciones con el PP.

Aunque se trató de la primera reunión y fuentes de CiU la calificaron de positiva, dirigentes de la federación se muestran escépticos sobre el resultado de las negociaciones, pues opinaron que "la mayoría de miembros de la ejecutiva de ERC apuesta por formar un Gobierno de izquierdas". Carod Rovira, por su parte, dijo que comtempla las negociaciones con cierto "escepticismo y distanciamiento". Carod recordó que en 1999, CiU pactó con el PP cuando existía la posibilidad de configurar una mayoría con Esquerra Republicana.

De izquierda a derecha, Joan Puigcercós y Ernest Benach, de ERC, y Josep Antoni Duran Lleida y Pere Macias, de CiU.
De izquierda a derecha, Joan Puigcercós y Ernest Benach, de ERC, y Josep Antoni Duran Lleida y Pere Macias, de CiU.MARCEL.LÍ SÁENZ

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_