Israel aprueba con condiciones un canje de presos con Hezbolá
Ariel Sharon no liberará a los detenidos libaneses implicados en casos de muerte
El Gobierno israelí aprobó ayer por 12 votos contra 11 aceptar un canje de prisioneros con la guerrilla fundamentalista libanesa de Hezbolá, pero excluye del intercambio a aquellos detenidos que pudieran estar implicados en la muerte de ciudadanos israelíes. La operación, que ha sido negociada durante los dos últimos años por mediadores alemanes, supone por parte de Israel la liberación de más de 400 presos palestinos y de una docena de activistas libaneses.
Israel consigue a cambio la entrega de un agente del Mossad, Elhanan Tanenbaum, y de los cadáveres de tres soldados secuestrados y posteriormente asesinados por la guerrilla fundamentalista libanesa.
La cláusula condicional del acuerdo israelí, que fue promovida por el ex primer ministro y actual responsable de Hacienda, Benjamín Netanyahu, deja fuera del pacto al guerrillero libanés Samir Kantar, detenido y condenado en 1979 a 542 años de prisión por el asesinato de dos civiles israelíes y una niña en Nahariya, al norte de Israel, donde consiguió llegar tras haberse infiltrado por la frontera con la ayuda de un comando palestino.
La negativa del Gobierno israelí a liberar a este guerrillero libanés coloca en una situación de incertidumbre el pacto negociado con Hezbolá. Los responsables de la organización fundamentalista anunciaron la pasada semana que no aceptarían que se modificaran los términos del acuerdo logrado con el mediador alemán y que la operación de intercambio no la llevarían a cabo si no eran liberados todos los prisioneros libaneses, incluido Kantar.
Por otra parte, el Gobierno israelí acogió ayer con duras críticas la decisión de la Autoridad Nacional Palestina de mantener al presidente Yasir Arafat como máximo responsable de sus fuerzas de seguridad, en detrimento del nuevo ministro del Interior, Hakam Baalawi, que sólo tendrá atribuciones sobre la policía civil. Un portavoz del Gobierno israelí aseguraba ayer de manera tajante que si los palestinos continuaban apoyando el protagonismo de Arafat nunca tendrían un Estado.
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