Las deudas a proveedores revelan que se ha hipotecado la sanidad, dice el PSPV
Los años de gestión del PP han "hipotecado" la sanidad valenciana. La diputada socialista Encarna Linares acusó ayer a los populares de haber llevado a la atención sanitaria pública al borde de la quiebra y para ello se apoyó en el hecho de que los valencianos son los ciudadanos con mayor deuda sanitaria per cápita de toda España. Según un estudio de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) cada valenciano debe 99,69 euros por facturas impagadas a proveedores. Por detrás están los andaluces (72,96) y, a más distancia, la deuda por persona de Canarias, 53,56 euros, Galicia (17,25 euros), Madrid (16,5), País Vasco (14,07), Murcia (12,5 euros) o Castilla y León (12,48).
A este dato, junto a la cifra total de los pagos pendientes que ascienden a 415 millones de euros, se refirió Llinares para definir la situación financiera de la Consejería de Sanidad como "terrible". La diputada comentó que estas cifras suponen deudas con los proveedores sanitarios, aunque hay más por otros conceptos, por lo que "no sabemos exactamente" cuál es la cifra total del déficit que arrastra el departamento que dirige Vicente Rambla. Respecto al peso de la deuda sanitaria en la deuda total, la Comunidad Valenciana vuelve a estar entre las primeras. Es tercera (un 5,51% de la deuda total es sanitaria), por detrás de Canarias (11,6%) y Andalucía (7,3%).
La consejería emitió ayer una nota para destacar el "importante esfuerzo presupuestario" que destinará "en especial en el capítulo referido a sufragar los gastos corrientes". Sanidad justifica la elevada deuda en el "alto esfuerzo inversor realizado en las dos últimas legislaturas" lo que "ha generado un volumen de gasto corriente que debe ser atendido". Por ello, señala, se ha aumentado un 44% la partida destinada a gasto corriente en hospitales y un 13,1% las cuentas totales del departamento.
Sin embargo, estas cifras y las intenciones de Sanidad son "un fraude" para Llinares. De acuerdo con la última modificación presupuestaria de este año, el incremento de las cuentas de 2004 respecto a 2003 "es de 4,46% y no del 13,1%" y además, "las inversiones descienden un 7%". Por ello, el incremento destinado para pagar los pagos pendientes de Sanidad "no será suficiente ni para amortizar la deuda ni para poner en marcha nuevos servicios, como dijo Rambla cuando presentó los presupuestos". Por todo ello "mientras el ex presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, dejó el barco a la deriva, Camps quiere hundirlo".
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