EE UU exige al líder de la OLP que no controle la seguridad

EE UU culpó ayer al presidente palestino, Yasir Arafat, del estancamiento del proceso de paz tras la dimisión de Abu Mazen y le exigió que ceda el control del aparato de seguridad al próximo primer ministro. Sin embargo, Washington se mostró contrario a la expulsión de Arafat de los territorios palestinos, con el argumento de que ello daría más protagonismo al veterano líder.

La consejera de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Condoleezza Rice, y el secretario de Estado, Colin Powell, afirmaron en distintas cadenas de televisión estadounidenses que Abu Mazen ha trabajado con las manos atadas y demandaron que el próximo primer ministro palestino cuente con el apoyo político suficiente para combatir el terrorismo si quiere avanzar hacia un Estado palestino independiente. "Arafat es un obstáculo para la paz", dijo Rice a Fox News.

Powell declaró al programa This Week, de la cadena ABC: "Sea quien sea el próximo líder de la Autoridad Palestina, debe tener bajo su control todas las fuerzas de seguridad y debe tener un mandato político sólido del CLP [Consejo Legislativo Palestino] para perseguir a las organizaciones terroristas". Después, en el espacio Meet the press, de la NBC, Powell reiteró que la Autoridad Palestina debe plantar cara a Hamás y los demás grupos radicales. "Si queremos un proceso de paz, si queremos desarrollar la Hoja de Ruta... entonces tiene que haber un esfuerzo coordinado contra Hamás y otras organizaciones", dijo. EE UU es, junto a la UE, Rusia y la ONU, uno de los integrantes del Cuarteto promotor del plan de paz conocido como Hoja de Ruta, que el sábado experimentó un brusco frenazo con la dimisión de Abu Mazen como primer ministro.

Powell expresó su desacuerdo con la idea de expulsar a Arafat. "¿Para qué serviría?", se preguntó el secretario de Estado. "¿Para darle un escenario mayor y permitirle operar fuera de la zona?".