Néstor Kirchner: "Acabaremos con la impunidad en Argentina"

El presidente argentino, Néstor Kirchner, aseguró ayer, nada más conocer la decisión del Gobierno español de no solicitar las extradiciones de 40 ex militares argentinos acusados de genocidio y terrorismo por el magistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, que su Ejecutivo no quiere que los crímenes queden sin castigo. "Ratificamos nuestra voluntad de terminar con la impunidad en Argentina", declaró Kirchner al llegar a la localidad sureña de El Calafate, donde iba a reunirse con su homólogo chileno, Ricardo Lagos. No obstante, el presidente argentino señaló que "es una responsabilidad de España" el hecho de no haber pedido las extradiciones.

El jefe del Ejecutivo argentino subrayó que "se mantiene la posibilidad de que los militares cuestionados de la última dictadura sean juzgados por la Justicia argentina", y destacó que el miércoles firmó el decreto que declara nulas las leyes de Punto Final y Obediencia Debida, que acarrearon el cierre de los juicios abiertos contra un millar de represores.

El ministro de Defensa, José Pampuro, abundó en la idea de su jefe de Gabinete y afirmó que los represores acusados de violar los derechos humanos durante la dictadura podrían ser juzgados por magistrados de ese país. "Abolidas las leyes, cuando en su momento sea, se procederá de acuerdo con los términos que la justicia determine", afirmó Pampuro después de aclarar que "serán los jueces quienes determinarán" si los acusados recuperan la libertad en los próximos días.