El comercio denuncia ante Economía las altas comisiones de las tarjetas

Todas las asociaciones del sector del comercio y hostelería han presentado ante el Servicio de Defensa de la Competencia una reclamación conjunta que acusa a las firmas de tarjetas de pago Servired, Sistemas 4B y Euro 6000 de "prácticas contrarias a la competencia" y cobrar unas comisiones a los comercios que superan los máximos de Bruselas. Las empresas de tarjetas dicen que los costes están adecuados a la utilización de este medio.

La batalla por las comisiones de las tarjetas de crédito continúa sin tregua. Esta vez el comercio persigue terminar definitivamente con el sistema de fijación de las tasas de intercambio (la comisión que paga el comerciante al banco por operaciones realizadas por el cliente con tarjetas)aplicadas por Servired, Euro 6000 y Sistemas 4B, pidiendo que se ajusten a estándares fijados por la Comisión Europea el 24 de julio de 2002.

Por ello, la Comisión Intersectorial de Comercio, Hostelería y Turismo, formada por la patronal de grandes superficies Anged, la Federación de Agencias de Viajes, la Confederación Española del Pequeño Comercio, la Federación Española de Hoteles y la Federación Española de Hostelería, ha denunciado ante Defensa de la Competencia a los sistemas de pago por considerar que las tasas aplicadas "son abusivas, poco realistas y contrarias a la competencia".

La tasa de intercambio ha sido fijada por la Comisión Europea en 28 céntimos para las operaciones de débito y en un 0,9% las de crédito, aunque con obligatoriedad sólo para las operaciones de Visa Internacional. En España, las comisiones fluctúan entre 0,85% y el 3,5%, con un promedio de 2,75%, dependiendo del tamaño del establecimiento (cuanto más grande, menos comisión).

Coste de 600 millones

A juicio del gerente general de la Confederación Española de Comercio (CEC) y vicepresidente de EuroCommerce, Miguel Ángel Fraile, esta diferencia significa un coste adicional de 600 millones de euros anuales en el balance de sus empresas, coste que sugiere que sea traspasado a los consumidores.

La defensa de Servired, Euro 600 y Sistemas 4B se sustenta en el bajo volumen de las transacciones nacionales y una utilización de estos medios de pago inferior al resto de Europa -equivalente a un 11% del consumo de las familias-, lo que confiere riesgo mayor.

La polémica se remonta a 1999, cuando se firmó un acuerdo entre las partes, que fue auspiciado por el Gobierno, con un límite de comisión del 2,75%. A juicio de los comerciantes, esta situación también estaría siendo sobrepasada, según dijo Fraile, ya que "más del 50% de las operaciones están por encima de esa media".

Esta versión es desmentida por los responsables de las tarjetas, que han asegurado que no se ha sobrepasado el límite fijado por ambas partes. Hace unas semanas ServiRed, que controla el 60% del mercado, anunció la reducción de su tasa máxima hasta el 2,5% y que se aplicaría el 2,04% para los pequeños comercios y el 1,7% para los grandes. Bruselas establece que se explique con detalle los costes aplicados en los cobros de las tarjetas. Esta última denuncia se suma a otra presentada por los comerciantes en 1999 y que permanece archivada.