El tabaco de contrabando ya sólo representa el 1,8% del consumo

El contrabando de tabaco ha caído de forma espectacular en España. Al cierre del pasado año representaba sólo el 1,8% del total del consumo nacional, frente al 16,2% que suponía en 1995, cuando era además una grave preocupación fiscal y de seguridad. Si en 1995 el Ministerio de Hacienda dejaba de ingresar 513 millones de euros (entonces 85.356 millones de pesetas) por el porcentaje de consumo de tabaco que no pasaba por el fisco, esta cantidad se ha reducido a 105 millones de euros al final del pasado año 2002, según datos de Aduanas y de las empresas.

En el año 2002, Hacienda ingresó por el impuesto especial del tabaco 4.919 millones de euros, cifra que se eleva a 6.427 millones si se suma el IVA del producto. Tan sólo hace unos años, el contrabando traía de cabeza a Hacienda y a las empresas del sector. Hoy es un problema menor para Hacienda, las empresas y los cuerpos de seguridad. Del precio final de una cajetilla que paga el consumidor, el 72% son impuestos. Esta cantidad se distribuye entre el IVA, el impuesto denominado ad valórem y el impuesto específico.

El problema del contrabando de tabaco no es asunto nacional. En la UE, el fraude por contrabando de tabaco ascendió el pasado año a 6.000 millones de euros, cantidad que los países miembros dejaron de ingresar por el comercio ilícito de tabaco. Estos datos fueron facilitados por la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) en un seminario que organizó el pasado mes de noviembre en Salamanca.

Denuncia

Incluso la Comisión Europea denunció el pasado mes de noviembre a la tabaquera Reynolds ante un juzgado de Nueva York acusándola de blanquear dinero procedente del contrabando.

Para Nicolás Bonilla, director de Aduanas e Impuestos Especiales de la Agencia Tributaria, en el año 2002 se ha logrado el séptimo mínimo anual consecutivo en el nivel de contrabando de tabaco rubio y además un mínimo histórico absoluto en el tercer trimestre: el 1,5% del consumo. Según Bonilla, la media anual de contrabando detectada (media de los trimestres) ha sido del 1,85%, lo que supone una caída del 20,2% con respecto al año anterior.

El responsable de Aduanas de la Agencia Tributaria señala que han sido tres los frentes de trabajo que han recortado las cifras de ventas de contrabando. Primero, se han incrementado las inversiones en tecnología, triplicadas desde 1996. En la actualidad, esta cifra es de 11 millones de euros anuales. En segundo lugar, se ha puesto en marcha una nueva generación de lanchas interceptadoras de altura, con autonomía superior a las 1.000 millas y con capacidad de persecuciones sostenidas a más de 35 nudos. En tercer lugar, actúa una nueva generación de helicópteros Dauphine de largo alcance.

Pero sin duda, en la fuerte caída del contrabando en el mercado español incidió fundamentalmente la denominada Operación Montaña, que se desarrolló desde noviembre del año 1998 hasta el mes de febrero de 2000. Esta operación, según ha informado la Dirección General de la Guardia Civil, tenía como objetivo la erradicación de las importantes partidas de tabaco de contrabando procedentes de Andorra que se introducían en España a través de la montaña o por la aduana de Farga de Moles.

Bloqueo

La operación consistió en el bloqueo de la frontera terrestre con Andorra en 24 puntos de forma continuada, y se saldó con 78 personas detenidas y la retirada del mercado de tres millones de cajetillas que superaban un valor en el mercado de 850 millones de pesetas. La operación tuvo un gran impacto en el contrabando de esa zona y logró efectos disuasorios para otras zonas fronterizas españolas.

Uno de los efectos de la reducción del contrabando en España fue su traslado a otros países, sobre todo al Reino Unido, donde una de cada cinco cajetillas de tabaco vendidas es ilegal, según se informa en la OLAF.

El principal motivo de este traslado en el contrabando es el precio de 10 euros al que se vende una cajetilla en Londres frente a los 0,50 euros que cuesta en origen. El 30% del contrabando de la Unión Europea proviene del Extremo Oriente y sobre todo de China.