Rusia ultima el catálogo digital del 'arte perdido'
El Ministerio de Cultura ruso terminará en los próximos días de construir la página web lostart.ru, donde cualquier persona interesada podrá ver los catálogos de obras que cayeron en manos de la URSS durante la Segunda Guerra Mundial y también las que desaparecieron de la Unión Soviética en ese periodo. Rusia ha comenzado así a cumplir con la ley sobre obras de arte y culturales desplazadas, aprobada en su redacción final en 2000. Los catálogos de lo que se conoce comúnmente como botín de guerra persiguen el fin de dar la posibilidad a los herederos legítimos de obras que se encuentra en poder de Rusia de tratar de recuperarlas y también de conseguir ayuda en la búsqueda de lo que los alemanes se llevaron del territorio ruso.
Para los extranjeros, se trata de cerca de un millón de objetos, en su mayoría documentos de archivos y libros. Las obras de arte son apenas dos centenares, la mayoría de ellas piezas arqueológicas, según explica Alexandr Kibovski, jefe del departamento de objetos culturales desplazados del Ministerio de Cultura.
La ley aprobada hace tres años contempla que los herederos de las víctimas del holocausto, las víctimas del nazismo, los combatientes de la resistencia y las organizaciones de beneficiencia y religiosas pueden exigir que se les devuelvan las obras que hoy se encuentran en diversos museos rusos y que fueron obtenidas como botín de guerra. La ley delimita claramente el círculo de personas que tienen este derecho, del que están excluidos los herederos de los nazis o de sus aliados.
Lo más valioso
La URSS mantuvo escondidos en sus depósitos los más valiosos objetos que saqueó durante la guerra y sólo con su desintegración el mundo pudo ver fantásticas colecciones que se creían perdidas para siempre. Muchos se quejan de que el Kremlin no quiere devolver lo que incautó, pero Kibovski lo niega y asegura que ningún país ha devuelto tantas obras como Rusia. A Francia le devolvió más de un millón de documentos históricos; Bélgica, Reino Unido y Holanda han recuperado una serie de archivos de los que se habían apoderado los soviéticos; Alemania, pinturas y vidrieras. El Gobierno ruso permitió la devolución de los dibujos del museo de Bremen en 2000 y también que un coleccionista particular entregara a Alemania tres cuadros que habían pertenecido al de Dresden.
Los expertos consideran que si puede ser relativamente fácil recuperar archivos o libros, conseguir la devolución de cuadros valiosos será sumamente difícil, ya que los rusos harán todo lo posible para impedir que las obras salgan de Rusia.
Una vez que se realice la presentación oficial de la página web y se informe a los posibles gobiernos interesados, los que consideren que tienen derecho de propiedad sobre alguna de las obras expuestas en lostart.ru tendrán 18 meses para recurrir a los tribunales o llegar a un acuerdo intergubernamental. Si en ese plazo nadie reclama la obra, será considerada definitivamente propiedad de Rusia.
Babelia
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