COAG anuncia protestas si Cañete no limita más el cultivo de algodón

La asociación agraria COAG está dispuesta a colapsar carreteras con sus tractores, como en febrero de 2002, si el Ministerio de Agricultura no renegocia su propuesta de regulación de la próxima campaña algodonera, plasmada en una orden que el Gobierno tiene previsto aprobar este mes. El secretario regional de COAG, Miguel López, señaló ayer en conferencia de prensa que si el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete no abre una mesa de negociación antes del lunes, la asociación cortará varias carreteras el martes, para luego intentar concentrar los tractores de los algodoneros ante la sede del Ministerio en Madrid.

Tal y como había planteado la Junta de Andalucía y la mayor parte del sector, salvo Asaja, el borrador de la orden del Ministerio de Agricultura añade a la rotación obligatoria de cultivo cada dos años (excepto diez hectáreas) una limitación que privilegia a los algodoneros tradicionales: para recibir la ayuda comunitaria, habrá que haber sembrado este cultivo en alguno de los últimos cuatro años. Con una condición similar se salvó el conflicto del algodón la campaña pasada, tras dos semanas de movilizaciones que forzaron al Ministerio a cambiar su posición inicial.

Pero el borrador de orden de la primera campaña incluye una excepción a esta limitación que el Ministerio ha cifrado en 8.000 hectáreas. Una ampliación de superficie que, según López, "supondría la ruina del sector". El secretario regional de COAG mantuvo que en el algodón "está entrando la especulación y el dinero negro" una situación ante la que se encontrarían en un estado de "indefensión intencionada" por "el derecho de pernada" del Ministerio.

Máximo de 3.000 hectáreas

López esgrimió un informe de la Consejería de Agricultura en el que fija en unas 92.000 hectáreas la superficie que se cultivaría si se mantuviese sin excepciones la exigencia de que los algodoneros hayan sembrado en alguna de las cuatro últimas campañas. Según las cuentas de la Consejería, con las 8.000 hectáreas excepcionales que quiere introducir el Ministerio, la superficie rebasaría las 100.000 hectáreas y la producción (el 95% en Andalucía) las 370.000 toneladas, por encima del tope (362.000) a partir del cual las penalizaciones comunitarias por exceso de producción se disparan.

COAG y la Consejería de Agricultura coinciden en que la superficie máxima que se puede ampliar excepcionalmente no debe superar las 3.000 hectáreas, aunque en las negociaciones con el Ministerio la Consejería dio inicialmente la cifra de 5.000. Ayer, el consejero de Agricultura, Paulino Plata, se mostró conciliador e hizo votos porque el Ministerio se acerque a sus planteamientos. Plata subrayó que en las negociaciones había "un alto nivel de acercamiento" y quiso quitar hierro a la "confusión" generada por una nota del Ministerio que daba por hecho el acuerdo pese a la notable discrepancia en el aumento excepcional de superficie.