Un virus gripal gástrico afecta a miles de niños y jóvenes catalanes

Miles de personas, principalmente niños y adolescentes, sufren desde hace varias semanas las consecuencias de un brote gripal que causa problemas respiratorios e intestinales y que está menguando la asistencia en muchos colegios catalanes. El Departamento de Sanidad ha informado de que no es el virus de gripe convencional que afecta a Cataluña todos los años, sino de una variante poco agresiva que tampoco ha obligado a activar los dispositivos de emergencia de los hospitales.

El director general de Salud Pública, Lluís Salleras, confirmó ayer la existencia de este brote, aunque negó que tenga carácter epidémico. "Se trata de un brote que puede afectar intensamente a algunas comunidades cerradas como colegios y familias, pero no tiene un gran alcance en el conjunto de Cataluña". Este brote está causado por el virus gripal B, que en muy raras ocasiones presenta un carácter epidémico.

La gripe de tipo A, la más frecuente en Cataluña durante el invierno, todavía no ha alcanzado cotas epidémicas este año, aunque Sanidad considera que aún podría presentarse en caso de registrarse una nueva ola de frío o cambios bruscos de temperatura.

El actual brote epidémico no ha causado, según Salleras, ningún colapso en los servicios de urgencias hospitalarios, aunque sí se ha notado un incremento en las visitas en los centros de atención primaria, donde se aconseja que se acuda en caso de tener los síntomas de este virus. Hasta la fecha, la zona más afectada por el virus han sido Girona y Lleida, aunque en las últimas semanas se ha incrementado su presencia en el área metropolitana de Barcelona.

Virus benigno

Lluís Salleras explicó que la mayor parte de afectados presenta un cuadro marcado por vómitos y diarrea combinados con síntomas de resfriado, "pero en general son cuadros benignos que no requieren grandes atenciones médicas", indicó ayer Salleras para tranquilizar a la población.

El vocal de la Sociedad Catalana de Médicos de Familia, Josep Lluís Vallvé, confirmó que la mayor parte de los afectados son niños y adolescentes, "aunque en ocasiones éstos actúan como reservorios del virus y lo transmiten directamente a los adultos".

Este médico agregó que el virus que está circulando tiene una naturaleza que lo hace "difícil de combatir". De hecho, los médicos no recomiendan utilizar antibióticos ni antidiarreicos, sino tratarlo de la forma tradicional: "En la cama y a base de dieta".

Vallvé recomienda controlar los vómitos con la ingestión de agua con limón y azúcar. Una vez cortado el vómito se puede comenzar a ingerir alimento líquido, como agua de arroz. "Cuando los vómitos hayan desaparecido se puede pensar en una comida más sólida a base de arroz y pescado hervido".

La previsión del Departamento de Sanidad es que tanto la actividad del virus de tipo B como la del tipo A se mantengan en los actuales niveles unas semanas más con las alteraciones propias de la época.