Londres apoya el plan de Francia y Alemania para la nueva UE
El Gobierno británico dio ayer una calurosa bienvenida al acuerdo franco-alemán sobre el futuro de las instituciones europeas. El ministro para Europa, Denis MacShane, se felicitó por el acuerdo "porque está en línea con las propuestas del Reino Unido". En un almuerzo con periodistas europeos, MacShane se declaró "encantado". "Nosotros hemos defendido la elección de un presidente del Consejo y nos parece fantástico que franceses y alemanes hayan acordado defenderla", dijo.
"Obviamente se trata de una contribución de dos países que se ha de discutir a 15, pero le damos la bienvenida", añadió. "Aunque aún no conocemos los detalles, también estamos interesados en su propuesta de que el Parlamento Europeo elija al presidente de la Comisión y en la idea de reforzar la política exterior común a través del Consejo de Ministros. Nos parece que son propuestas que van en la buena dirección, aunque queremos conocer los detalles".
El ministro británico no consideró como un problema que Europa siga manteniendo una cierta confusión en su representación pública por el hecho de tener dos presidentes con fuertes raíces políticas, como se deriva de la propuesta franco-alemana. "Europa es demasiado grande como para estar representada por un Führer o por un Duce", dijo medio en broma medio en serio.
MacShane, que accedió al cargo de responsable de los asuntos europeos en otoño pasado, es un militante europeísta convencido, probablemente muy por encima de la media británica. Quizá por eso saludó el acuerdo del Elíseo no sólo por su contenido, sino por su simbolismo: "Si Francia y Alemania no trabajan juntos, Europa no funciona; Europa funciona cuando trabajan juntos, como lo hicieron Giscard y Schmidt para empezar a crear el euro o Kohl y Mitterand al sellar la reconciliación y crear el mercado único".
