El Ararteko cree que el Observatorio de Derechos Humanos "toca" su labor

La ararteko en funciones, Mertxe Agúndez, expresó ayer su preocupación ante el proyecto del Observatorio de Derechos Humanos que impulsa el lehendakari Ibarretxe. Agúndez admitió que el primer borrador que conoció sobre esta iniciativa "tocaba" y "ponía en duda" las atribuciones de la institución del Ararteko. Agúndez remitió hace unos meses un informe tanto a Federico Mayor Zaragoza, ex director general de la Unesco que ha diseñado el Observatorio, como al lehendakari Ibarretxe, para mostrarles su inquietud ante el posible recorte de sus competencias.

A pesar de esta preocupación, la ararteko en funciones hizo hincapié en que, por ahora, se trata de un borrador al que el Gobierno no ha dado el visto bueno. "Es un tema que está en estudio. Espero que el proyecto definitivo no recoja lo que contiene el borrador original porque puede ponerse en duda del trabajo del Ararteko".

Poco después de que la ararteko, Mertxe Agúndez, mostrará su inquietud tras comparecer ante la ponencia del Parlamento que estudia la situación de las víctimas del terrorismo, el portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, trató de despejar sus dudas. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, aseguró que el Observatorio de Derechos Humanos, al que dará luz verde en breve el Ejecutivo, no nace con la intención de sustituir ni 'entrometerse' en las funciones que desarrollan otras instituciones, como el Defensor del Pueblo Vasco. Según Imaz, el Observatorio será un elemento más 'a la hora de salvaguardar las libertades y los derechos humanos'. Imaz reconoció que en este campo 'hay sitio para todos', pero zanjó la cuestión reiterando que 'no se va a limitar los campos de actuación de ninguna institución'. El Observatorio de Derechos Humanos es uno de los proyectos emblemáticos que prepara el lehendakari para esta legislatura. Con el genérico objetivo de defender 'las libertaddes y los derechos' de todos los ciudadanos, para este año cuenta con una asignación presupuestaria de 1,1 millones de euros y de 1,6 millones para el próximo año. Este organismo no tendrá que dar cuentas de su actución al Parlamento, algo que sí ocurre con el Ararteko. Podrá proponer iniciativas de todo tipo y deberá elaborar un informe anual sobre la situación en Euskadi. Estará integrado por 21 miembros elegidos por diferentes instituciones, aunque siete de ellos los nombrará directamente el lehendakari. Por otra parte, durante su comparecencia en la ponencia de víctimas del terrorismo, Agúndez denunció que durante 'muchos años' se ha considerado a las víctimas como 'cosas' y que al hacerlo se ha 'perdido su mirada' y se han olvidado sus sentimientos. Reconoció que desde hace un tiempo se está dando una 'reparación material' de las víctimas en cuanto a indemnizaciones y otro tipo de apoyos, pero recalcó que 'no es suficiente'. Agúndez advirtió de que el sistema democrático está en peligro en Euskadi y criticó que algunos ayuntamientos celebren actos de ensalzamiento de terroristas, lo que supone un escarnio para las víctimas. El Defensor del Pueblo de España, Enrique Múgica Herzog, también compareció ante la ponencia, donde criticó a 'quienes no hacen tanto como debieran' para impedir que el derecho a la libertad de miles de vascos se vea 'quebrantado'. Múgica exigió una reparación 'moral y material' para las víctimas. 'Si se les aisla, también se margina a la democracia', aseguró.