Agricultura crea un nuevo sistema de información sobre subvenciones al olivar

Los olivareros tienen a su disposición un nuevo mecanismo que les permitirá conocer "sin intermediarios" la situación del trámite de su solicitud de ayudas. A través de una tarjeta electrónica con claves personalizadas, los expedientes se podrán consultar en Internet o por teléfono, por lo que será posible subsanar cualquier error o requerimiento de información sin necesidad de desplazamientos o de terceras personas.

Con este sistema, presentado ayer por el consejero de Agricultura, Paulino Plata, Andalucía inaugura un sistema que ya ha interesado a otras comunidades, entre ellas Cataluña, que pretenden seguir el modelo.

Agricultura tiene previsto entregar un total de 245.000 tarjetas, que previamente tendrán que ser solicitadas por los olivareros. En la primera fase de implantación se prevé llegar a 50.000 personas, pero su uso tendría que estar generalizado en la campaña oleícola 2002-2003, según indicó Plata.

"Tenemos la obligación de ser más transparentes y más eficaces", subrayó el consejero aludiendo a la relación de las administraciones con los ciudadanos. Con la tarjeta y el acceso directo a través de Internet, o un teléfono gratuito, se pretende "que nadie desinforme" sobre la situación en que se encuentra cualquier tramitación administrativa.

El nuevo sistema de información en la gestión de las ayudas al olivar, la denominada tarjeta del oleicultor, ha supuesto este año una inversión de dos millones de euros e implicará nuevos gastos en los próximos ejercicios para mantener y ampliar la información.

Plata aseguró que la tarjeta se introducirá sin problemas en el medio rural ya que, aunque los olivareros no tengan conexión a Internet en sus domicilios, sí la tienen las cooperativas en las que entregan el aceite. "Ésta es una oportunidad para avanzar en la extensión de las nuevas tecnologías", añadió Plata en Jaén, donde reunió a representantes del sector para exponerles el programa que estará funcionando esta misma semana.

El consejero de Agricultura explicó también ayer que la Junta no acepta la documentación del Sistema de Información Geográfica (SIG) que le ha transmitido el Ministerio, en el que se basan las ayudas, ya que ha llegado incompleta.

La Junta desconoce aún cuántos olivareros no están de acuerdo con la evaluación de sus propiedades realizada por Madrid.

Entre la información que se ha omitido está la edad de cada uno de los olivos que hay en Andalucía, un requisito que debe cumplimentarse para adaptarse a las exigencias de la UE.