Una firma británica lanzará en 2003 medicinas basadas en el cannabis

La empresa GW Pharmaceuticals anunció ayer que ha acabado con éxito la última fase de cuatro ensayos clínicos con medicamentos obtenidos del cannabis, y destinados a probar su eficacia contra el dolor y los síntomas de la esclerosis múltiple. La compañía se declaró preparada para empezar a comercializar esos medicamentos a partir el año que viene, si obtiene autorización de la agencia del medicamento británica. Las investigaciones sobre el uso terapéutico del cannabis fueron alentadas por la Cámara de los Lores hace cuatro años.

Para que GW Pharmaceuticals pueda comercializarlas, las medicinas deben antes ser autorizadas por la Agencia de Control de Medicamentos británica. Las pruebas, realizadas sobre un total de 350 pacientes, concluyen que los componentes activos del cannabis -suministrados en este caso mediante un pulverizador que se aplica en la boca- reducen de manera significativa el dolor neuropático (debido a los daños en el sistema nervioso) asociado a distintas patologías, y también varios síntomas de la esclerosis múltiple, incluidos el dolor y las alteraciones del sueño.

A los pacientes se les suministró, mediante el sistema de placebo aleatorio doblemente ciego, extractos de planta de cannabis que contenían tetrahidrocannabinol (THC) y cannabidiol (CBD), que son los dos principales componentes activos del hachís y la marihuana.

'Los resultados preliminares de la fase 3 constituyen un hito de gran calado en el desarrollo farmacéutico de medicinas basadas en cannabis', afirmó el presidente ejecutivo de GW, Geoffrey Guy, en una nota difundida por la compañía. 'El éxito ha superado nuestras expectativas', añadió. 'Nuestros rigurosos exámenes indican que las medicinas basadas en cannabis pueden suministrar beneficios adicionales por encima de y más allá de los tratamientos convencionales en este tipo de condiciones neurológicas graves y refractarias', opinó el doctor Philip Robson, director médico de GW.

Otros usos

La empresa británica cree que las medicinas derivadas del cannabis pueden ser utilizadas para el tratamiento de enfermedades como el síndrome de agotamiento que provoca la pérdida de peso y masa muscular en los enfermos de sida, enfermedades cerebrales y apoplejías, náusea asociada a los tratamientos de cáncer con quimioterapia, dolor, lesiones de la médula espinal, tumores, asma, desórdenes de la alimentación, epilepsia, glaucoma, hipertensión arterial, migraña, esquizofrenia o síndrome de Tourette, entre otras.

Fundada en 1998 para investigar la producción de medicamentos basados en cannabis y cannaboides, GW Pharmaceuticals cultiva legalmente 40.000 plantas de marihuana en un lugar secreto del Reino Unido. Las investigaciones sobre el uso del cannabis fueron alentadas por la Cámara de los Lores ese mismo año en un histórico dictamen de un comité de expertos que recomendaron al Gobierno que alentara 'con urgencia las pruebas clínicas del cannabis para el tratamiento de la esclerosis múltiple y dolores crónicos'.

Los lores dictaminaron que, aunque no tenían 'evidencias científicas lo bastante rigurosas para probar de manera concluyente que el cannabis por sí mismo tenga o no valor médico alguno', sí habían recibido información suficiente para convencerse de que el cannabis 'casi con seguridad tiene aplicaciones médicas genuinas, especialmente en el tratamiento de espasmos musculares dolorosos'.

Robson asegura que 'los resultados muestran reducciones estadísticamente significativas en el dolor neuopático, reconocido como un dolor difícil de tratar, y particularmente molesto'. También hubo mejoras significativas en otros síntomas de los pacientes con esclerosis múltiple, como los espasmos. 'En mi opinión', dice Robson, 'este amplio espectro de actividad, acoplado a un excelente perfil de seguridad, confiere a los medicamentos basados en el cannabis el potencial de hacer una contribución única para mejorar la calidad de vida de estos pacientes crónicos'.