El pleno de la Diputación de Barcelona insta al PP a retirar la ley

La supresión del impuesto de actividades económicas (IAE) para la mayor parte de los contribuyentes provocó ayer el rechazo de la Diputación de Barcelona. El plenario de la corporación instó al Gobierno a retirar la reforma del IAE porque 'supondrá una reducción de los actuales ingresos de las corporaciones locales sin que esté prevista ninguna compensación por parte del Gobierno'. La propuesta tuvo el apoyo de los socialistas, Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) y Esquerra Republicana (ERC), que gobiernan la corporación, y no fue respaldada por el PP ni por CiU. La Diputación de Barcelona agrupa a 311 municipios. La izquierda gobierna en poblaciones donde vive el 80% de la población de la provincia.

El presidente de la diputación barcelonesa, el socialista Manuel Royes, afirmó que las declaraciones realizadas el miércoles por el presidente Aznar en las que éste acusó a los ayuntamientos dirigidos por la izquierda, entre los que se cuentan los más importantes de Cataluña, de mantener una muy elevada presión fiscal, están salidas de tono. 'Ningún presidente de la democracia había hablado de los ayuntamientos como lo ha hecho Aznar', dijo Royes.

Maragall reta a Aznar

El responsable de Hacienda de la Diputación, Joan Rangel, rechazó como falsa la acusación de Aznar. Rangel aseguró que los ayuntamientos de León, Oviedo, Zaragoza, Logroño y Cádiz, gobernados por el PP, tienen una presión fiscal superior a la del Ayuntamiento de Badalona, gobernado por la izquierda y uno de los que Aznar había citado la víspera como de los de mayor presión fiscal de España. Rangel dijo que sus datos salen de las cifras de los propios ayuntamientos sumando los impuestos directos, los indirectos y las tasas y dividiéndolas por la población total para obtener la presión fiscal por habitante.

Desde el PP, el diputado provincial Xavier García Albiol negó que haya una agresión del Gobierno a los ayuntamientos porque el PP es 'el partido que más alcaldes tiene en España y por tanto tiene interés en defender al mundo local'. CiU, que defiende la reforma del IAE pero discrepa de la forma de modificar este impuesto, votó en contra de la moción de la Diputación de Barcelona de instar al Gobierno a retirar el proyecto de ley.

El presidente del PSC y ex alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, calificó las acusaciones de Aznar contra los ayuntamientos de la izquierda como 'una deslealtad institucional intolerable' y que muestra que el presidente del Gobierno 'ignora los mecanismos de funcionamiento de un Estado complejo, como es el español'. Maragall afirmó que de las palabras de Aznar se desprende que 'ignora la realidad municipal' y se brindó a tener una entrevista 'con él o con quien él quiera' para discutir sobre las finanzas de los ayuntamientos.