Dos colegios concertados denunciados por irregularidades en los cobros alegan que los pagos de los padres eran voluntarios

La Vall y La Farga, dos de las cinco escuelas concertadas denunciadas por el sindicato USTEC-STE ante la Agencia Tributaria por presunto fraude fiscal, afirmaron ayer que las aportaciones que realizan los padres a la fundación Vaixell, vinculada a ambos centros, son totalmente voluntarias y no constituyen un pago encubierto de servicios educativos, tal como acusa el sindicato. USTEC alega también que estos pagos se utilizan de forma indebida para desgravar en la declaración de la renta, lo que sólo se puede hacer si son donativos, es decir, si no se recibe contraprestación alguna por ellos. Josep Maria Barnils, director de la Institución Familiar de Educación, que engloba estos dos centros y 10 escuelas más de inspiración religiosa, afirmó ayer que a los padres de los alumnos de esos centros se les pide una aportación voluntaria para cubrir la diferencia entre el dinero que reciben ambos centros de la Generalitat y 'lo que realmente cuesta la educación, porque el concierto en muchos casos sólo cubre el 60% del coste de la plaza escolar', precisó.

Barnils aseguró que entre el 25% y el 35% de las familias no realizan 'ningún donativo' a la fundación y 'no pasa nada', aunque reconoció que los centros no explican que los pagos son voluntarios. Sólo consta su voluntariedad en los recibos de los pagos; es decir, cuando la aportación ya ha sido realizada.

Barnils también rechazó la acusación de presunto fraude fiscal alegando que el hecho de que los padres desgraven en su declaración de la renta sus aportaciones a la fundación no constituye un trato de favor respecto a los padres de la escuela pública, que 'nada pueden desgravar porque nada pagan'. Barnils, que acusó a USTEC de tener 'una fijación' contra determinadas escuelas y sugirió que han presentado la denuncia porque se acercan elecciones sindicales. Rechazó que ambas escuelas estén catalogadas como de élite. Barnils señaló que tienen entre 'el 2%, el 3% o el 4% de alumnos de procedencia inmigrante', y que muchas familias que llevan sus hijos a estos centros 'se encuentran en el paro'.

El pasado 17 de octubre, USTEC presentó una denuncia ante la Agencia Tributaria contra cinco escuelas privadas concertadas por presunto fraude fiscal al encubrir como aportaciones voluntarias a la fundación vinculada a cada uno de los centros los pagos por prestación de servicios educativos y por desgravar estos pagos. Los colegios acusados, además de La Vall y La Farga, son Viaró, Garbí y Pere Vergés y sus fundaciones respectivas.