Primer ministro real
Al nombrar primer ministro a Driss Jettu, presentado como independiente pero hombre del rey y del Majzén (el establishment marroquí), Mohamed VI ha ido más allá de lo que tradicionalmente son los poderes del soberano. Este gesto demuestra que, además de los ministerios de soberanía real (Interior, Justicia, Defensa y Asuntos Religiosos), cuyos titulares nombra, también la designación del jefe del Gobierno es independiente de la voluntad popular. La decisión del rey no favorece la imagen de un Marruecos supuestamente en transición a la democracia.
Jettu, como titular de Interior, ha sido el organizador de las elecciones del 27 de septiembre, cuyos resultados, con una abstención oficial del 48%, se demoraron de forma sospechosa. La fuerza más votada fueron los socialistas de la USFP de Yussufi, seguidos de los nacionalistas del Istiqlal y de los islamistas moderados.Aunque Yussufi, de 78 años, ya indicó su voluntad de dejar la política, la intervención del rey puede frustrar los intentos de los socialistas para construir una mayoría con otros partidos y dejar en la oposición al Istiqlal y a los islamistas moderados. El nuevo primer ministro se presenta como un hombre integrador, y la declaración oficial de Palacio deja translucir la idea de que, para responder al deterioro de la situación económica, Jettu intentará formar un Gobierno con el mayor respaldo posible, quizás una gran coalición en la que cupieran incluso los islamistas moderados. El peligro de tal objetivo es que dejaría como oposición a los islamistas más radicales de la organización Justicia y Caridad, que se negaron a participar en las elecciones.
La normalización de las relaciones entre Rabat y Madrid es imprescindible para una mejora de la economía marroquí, sobre todo por la caída de la inversión exterior y de los ingresos por turismo que ha generado la crisis. El cambio de Ejecutivo debería ser una buena ocasión para recomponer los platos rotos, después de que Madrid haya saludado la 'independencia, eficacia y pragmatismo' del nuevo primer ministro.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.