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El jefe de los paramilitares de Colombia se entregará a EE UU

Uribe recibe el apoyo de Bush en su visita a Washington

'Me entregaré a Estados Unidos', afirmó Carlos Castaño, jefe político de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) dos horas después de conocerse la petición de extradición hecha por la justicia norteamericana. El fiscal general de Estados Unidos, John Ashcroft, lo acusa de cinco delitos de narcotráfico.

En una entrevista telefónica, de más de media hora con la cadena de radio RCN, el temido paramilitar se mostró ayer seguro de su 'verdad': 'Voy a exigir mi libertad', repitió con insistencia. 'Nunca he tenido participación en el narcotráfico y siempre he sido su enemigo natural', añadió.

Castaño, de 40 años de edad y que hace 20 le declaró la guerra a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), explicó que antes de someterse a la justicia hará 'los ajustes pertinentes dentro de mis obligaciones profesionales y mi vida familiar'. La idea es delegar tareas, ordenar relevos y cambios en la línea de mando de este Ejército ilegal que agrupa a más de 10.000 combatientes.

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La noticia de la petición de extradición, conocida el martes mientras el presidente Álvaro Uribe visita Washington, sorprendió al país. Para muchos analistas las declaraciones de Castaño dejan la sensación de la existencia de un acuerdo.

El presidente de EE UU, George W. Bush, comentó ayer que su Gobierno hará que los terroristas rindan cuentas ante la justicia, informa Efe. Durante su entrevista con Uribe, Bush reafirmó su compromiso de apoyar al nuevo presidente colombiano en su lucha contra la violencia y en favor de la recuperación económica. Por su parte, Uribe agradeció el apoyo de Estados Unidos para 'preservar los valores democráticos' y señaló que la Administración de Bush es 'una aliada esencial en nuestra lucha contra el terrorismo'.

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Castaño, en su larga entrevista de radio acusó a las FARC de narcotraficantes. Para él sería una mala señal que Estados Unidos no solicite la extradición de los jefes guerrilleros. 'Entenderé que he sido negociado entre el Gobierno de los Estados Unidos y las FARC', manifestó el responsable de los paramilitares colombianos.

El ministro del Interior y Justicia, Fernando Londoño, aseguró ayer al mediodía que, si hay coherencia en la política de Estados Unidos, en el curso de pocas horas debería existir la petición de extradición de los guerrilleros. 'Otra cosa no la entendería jamás', señaló ministro.

Confesiones de autobiografía

Hace año y medio, Castaño empezó a dar pasos para lavarse las manos frente a la treintena de crímenes que se le imputan en Colombia, algunos de ellos confesados en su autobiografía publicada hace un año. Las autodefensas han sido los mayores violadores de derechos humanos en el país en los últimos años.

En mayo de 2001, Castaño renunció a la jefatura del Ejército paramilitar de ultraderecha. Argumentó que no respondía por actos de narcotráfico y matanzas ejecutados por personas fuera de su control. En julio pasado anunció la disolución de las AUC. En septiembre reunificó gran parte de la organización, pero siguió insistiendo: 'El nefasto negocio del narcotráfico destruyó a las AUC'.

Junto a Castaño, Estados Unidos pide la extradición de Salvatore Mancuso, jefe militar, y de Juan Carlos Sierra. Ayer se supo que Castaño será juzgado también por delitos de terrorismo. No se conoce aún si este anuncio cambia los planes de Castaño de entregarse en Colombia para ser juzgado en Estados Unidos.

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