La Iglesia alemana estudia cómo terminar con los curas pederastas

La Conferencia Episcopal Alemana celebró ayer por primera vez una reunión para definir su postura ante los casos de abusos sexuales a menores por parte de sacerdotes, descubiertos en los últimos meses. El monasterio de Himmelspforten, en la localidad bávara de Würzburg, acogió este encuentro, primero de una serie de reuniones que culminará el próximo día 23 de septiembre en su asamblea general de otoño, en la que los obispos quieren fijar líneas de actuación frente a esos casos que sean comunes a todas las diócesis. El presidente de la conferencia, cardenal Karl Lehmann, es partidario de que todas las diócesis se atengan al mismo procedimiento cuando descubran supuestos abusos sexuales. En la asamblea se consensuarán asimismo medidas preventivas.

A finales de abril, Lehmann ya anunció la creación de una comisión para investigar no sólo los casos más recientes, sino todos los descubiertos en los últimos años. 'Para los obispos, ésta es la última gran oportunidad para abordar por fin estos casos de una manera abierta', manifestó a las puertas del monasterio donde se reunieron los obispos un portavoz del movimiento de laicos Somos Iglesia. Esta organización considera que los abusos no pararán mientras la Iglesia católica no reconsidere sus posiciones con respecto a la sexualidad.