Un antiguo fraile franciscano, imputado por abuso de menores en Cádiz

Fuentes de la Guardia Civil han indicado hoy que la detención se debió a una denuncia interpuesta hace varios meses por Ángel S.R., quien manifestó haber padecido abusos sexuales desde los 14 años, cuando fue acogido en un centro benéfico de Ceuta, por éste y otros dos religiosos de la misma asociación y a los que conoce desde todos estos años.

La Asociación Benéfica y Católica Obreros de la Cruz, que preside este ex franciscano, José Herrera Pérez Blanco, se dedica a cuidar ancianos enfermos y niños deficientes, labor por la que recibe subvenciones de la Junta de Andalucía. La organización ha negado estas acusaciones y asegura que los denunciantes "sólo quieren dinero".

Por su parte, el abogado del imputado asegura que su cliente ha contestado a esas acusaciones con una querella por calumnias e injurias. Este letrado confirmó que su cliente fue detenido la semana pasada por agentes de la Guardia Civil en Madrid y prestó declaración ante el Juzgado de Instrucción número 27 de la capital, que le dejó en libertad sin fianza.

Denuncia de un joven venezolano

El responsable de la Asociación Obreros de la Cruz, tiene 50 años y está imputado por estas supuestas agresiones sexuales después de haber declarado ante la Guardia Civil, aunque su hermana niega que haya sido arrestado.

Las investigación ha corrido a cargo del Equipo Mujer-Menor (Emume) de la Guardia Civil de Cádiz, tras la denuncia presentada por Marco Antonio Rosendo. Se trata de un joven venezolano que en la actualidad reside en Alicante, pero que vivió durante un tiempo en las residencia que la Asociación Obreros de la Cruz tiene en la localidad gaditana de Medina Sidonia.

A principios de septiembre Rosendo, que en la actualidad tiene 23 años, denunció que cuando llevaba nueve meses en el convento dos franciscanos empezaron a abusar de él. Si accedía a tener relaciones sexuales, le prometían traer desde Venezuela a sus tres hermanos. Afirma el denunciante que, desde que acudió a la Guardia Civil de Alicante, ha recibido diversas llamadas amenazantes, por lo que ha solicitado al juzgado que le pinchen el teléfono.

Segunda denuncia

Ángel Sánchez es otro antiguo residente de la comunidad de Obreros de la Cruz en Medina Sidonia, que hasta hace unos meses trabajó como chófer de José Herrera Pérez - Blanco, al que también ha denunciado. En julio de este año se presentó ante la Guardia civil para denunciar a varios miembros de esta organización por hechos similares a los descritos por Marco Antonio Rosendo.

Sánchez, quien niega que su denuncia responda a un interés económico, asegura que sufrió agresiones sexuales dsde los cartorce años, cuando conoció al José Herera Pérez-Blanco en una casa de la Fundación "Cruz Blanca", en Ceuta, en la que había sido acogido tras escaparse de la casa de sus padres.

"Campaña de desprestigio"

El director de la Subcomisión de la Familia y para la Defensa de la Vida de la Conferencia Episcopal, Inocente García, recordó hoy que "todo el mundo es inocente hasta que se demuestre lo contrario", en relación al franciscano. García señala que la difusión de esta noticia se suma a la "campaña de desprestigio" emprendida contra la Iglesia "porque defendemos unos principios morales que no parecen los políticamente correctos" en relación a la sexualidad y los homosexuales.

"Evidentemente, hay ciertos grupos y parte de la sociedad que no le perdonan a la Iglesia el que no ceda a la presión de los homosexuales y toda la revolución que se está viviendo en el terreno sexual", sentenció. García concluyó que, a pesar de estas denuncias, "la Iglesia no va a cambiar sus principios morales y las valoraciones morales que hace sobre la homosexualidad, que es muy negativa".