_
_
_
_
Reportaje:

Los oscuros negocios de la primera dama peruana

La esposa del presidente Toledo, forzada a renunciar a un sueldo de 10.000 dólares en un banco ligado a Vladimiro Montesinos

La popularidad del presidente de Perú, Alejandro Toledo, se desmorona. Según los sondeos, Toledo tiene al 83% de la población en contra y la tendencia es a la baja. Al escándalo que produce su negativa a reconocer a una supuesta hija, se añade la revelación de que su esposa, Eliane Karp, cobraba 10.000 dólares al mes del Banco Wiese Sudameris, el segundo del país.

El poder judicial investiga los vínculos que ese banco mantuvo con el hoy preso Vladimiro Montesinos, el siniestro jefe de los servicios secretos del expresidente Alberto Fujimori, fugado a Japón, tierra de sus ancestros. Karp se ha visto obligada a renunciar a su contrato con el banco, pero argumenta que todo es una 'manipulación política para perjudicar a la pareja presidencial' y a las instituciones democráticas de Perú. Asegura Karp que su contrato data de 1997 con un banco que luego se fusionó con el Wiese.

Más información
Secuestrada en Perú la esposa de un empresario amigo del presidente Toledo

La prensa peruana había denunciado que Eliane Karp tenía un contrato de asesoría por 10.000 dólares al mes. Esto lo confirmó el Banco Wiese, al que en su día confió sus espectaculares ahorros Montesinos, que ahora espera su juicio en una cárcel de alta seguridad. El gerente del Wiese, Eugenio Bertini, está acusado de tráfico de influencias, tras publicarse un vladivídeo de los grabados por Montesinos para sus extorsiones. En el vídeo se ve a Bertini recomendar a Montesinos abrir una cuenta en Gran Caimán.Tras conocerse el contrato de la esposa de Toledo con el banco estallaron las críticas en la prensa y de la oposición. Las alimentaba el hecho de que Karp había proclamado su dedicación exclusiva a sus tareas como primera dama, que implican actividades humanitarias hacia la niñez y los desamparados. Es decir, una función pública. Incluso en una entrevista Karp bromeaba por la circunstancia, desmentida ahora por los hechos, de que por primera vez tiene que pedirle dinero a su esposo.

El 'Rasputín' de Fujimori

Bertini sostiene que su paso por el local del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), donde lo filmaron, se debió al deseo de Montesinos de presentarle a José Francisco Crousillat, entonces mandamás del Canal 4 de Televisión y hoy prófugo de la justicia. Crousillat es uno de los dueños de canales de televisión al que grabaron cuando recibía dinero a manos llenas de Montesinos. En dicha reunión, asegura Bertini, Montesinos le pidió que el Banco Wiese concediera un crédito para mejorar la situación de uno de los canales favoritos del Rasputin de Fujimori.

El contrato de la esposa del presidente salió a la luz mientras ella y su joven hija Chantal se encontraban fuera de Perú. Un viaje rodeado de misterios y mentiras. Primero se especuló sobre la posible ruptura de la pareja presidencial, ante la aparente decisión de Toledo de reconocer a una chica de 15 años, Zaraí, como su hija.

Desde hace 14 años la madre de Zaraí lleva adelante una batalla legal para que Toledo asuma la paternidad. El presidente se niega a la prueba del ADN solicitada por la justicia. Ahora la decisión está en la Corte Suprema, pero, más allá de cuestiones legales, el caso de Zaraí ha adquirido interés público y afecta, según las encuestas, la popularidad y credibilidad de Toledo. La mayoría de los peruanos desea que Toledo se someta a una prueba de ADN.

Portavoces palaciegos desmintieron los rumores de ruptura de la pareja presidencial y aseguraron que la primera dama había viajado a Francia. A los pocos días, sin embargo, la prensa chilena les tapó la boca, al confirmar que madre e hija se encontraban en Tahití.

Tal vez, la escena que mejor expresa la falta de sintonía del Gobierno peruano con el pueblo es el recibimiento tributado por el Ejecutivo en pleno a la esposa del presidente, que regresaba de sus vacaciones tras la denuncia del contrato que la unía al controvertido banco. Aunque Karp no había cometido un delito, saltaba a la vista un conflicto de interés que podía resolverse con su renuncia a la asesoría.

En un mitin, evidentemente financiado con fondos públicos, Karp pronunció un discurso en el que defendió su derecho como mujer trabajadora. La escuchó, en el aeropuerto, una enfervorizada multitud de partidarios, entre los que se contaban casi todos los ministros con Toledo a la cabeza. En el acto se distribuyeron pasquines contra la prensa que informó del contrato que unía a Karp con el banco.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_