El mal tiempo hace mella en el campo por segunda vez en pocos días

La agricultura valenciana no vive su mejor verano. Ayer llovió sobre mojado. Una semana después de que un temporal causara daños millonarios en las cosechas de la Ribera Alta, en otros puntos de Valencia e incluso de Castellón el campo volvió a resentirse con las inclemencias en forma de lluvia y granizo de los dos últimos días. Las organizaciones agrarias destacaron el daño producido en los cultivos de frutales y hortalizas de la Ribera Alta y en la vid de la zona de Utiel-Requena. Pero no fueron las únicas zonas afectadas, ya que el mal tiempo dejó secuelas a lo largo y ancho del territorio valenciano.

A pesar de que en el sector agrario explicaban que las tormentas de estos días fueron menos dañinas que las del 1 de agosto, las lluvias suponen nuevas estimaciones de pérdidas. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA) las cifró en 106 millones de euros. La Unió de Llauradors, sin embargo, no quiso cuantificar las pérdidas porque las zonas más dañadas ya sufrieron los efectos del granizo la semana pasada. La Denominación de Origen Utiel-Requena adelantó que los daños a nivel global no son cuantiosos.

El temporal de agua y granizo también ha provocado estos días inundaciones en sótanos y plantas bajas en L'Alcoià y El Comtat. El agua arrastró ayer unos 15 coches y motocicletas que estaban estacionados en en el barranco de La Cala, en Finestrat, según la Policía Local. Los agentes se vieron obligados a cortar el tráfico de algunas calles para evitar que la fuerza del agua produjera más daños. En San Juan y El Campello, la policía local y los bomberos recibieron alrededor de una decena de llamadas por inundaciones de bajos, vecinos atrapados en ascensores o problemas con vehículos consecuencia de una fuerte tromba de agua.

Mientras, las poblaciones de Muro, Cocentaina, Fageca y Famorca se recuperaban ayer de la tromba de agua del jueves.