Apoyos para ampliar el Prado

'El cuestionamiento infinito a la ampliación del Prado debe acabar. La opinión pública cuenta, pero debe ser respetuosa con aquellos que están bien informados y no rechazar un proyecto de un arquitecto de gran prestigio por razones que son completamente de gusto', aseguró ayer el arquitecto y artista Juan Navarro Baldeweg sobre el auto del Supremo que plantea una garantía cautelar para detener las obras de ampliación. 'La intervención está planteada con cuidado y con el mayor respeto, no encuentro motivos de disconformidad. Es un proyecto que ha sido debatido y ha pasado todos los controles de calidad. Se trata de un bien acordado socialmente que no tiene porqué pararse por intereses particulares, ni siquiera los políticos pueden hacerlo'.

El italiano Roberto Collovà, quien aseguró que las leyes de patrimonio italianas son muy conservadoras y no permitirían que se desmontara y trasladara un edificio protegido, coincide con su colega: 'Si el proyecto de Moneo ha superado todos los requisitos legales debe continuar'. Opinión que comparte Guillermo Vázquez Consuegra: 'Si el proyecto ha superado todo el procedimiento legal, también ha estado a disposición de la opinión pública, con lo cual es un asunto zanjado y la remodelación no puede dar marcha atrás'. Carlos Meri, secretario del curso, añade que este tipo de polémicas perjudica a la arquitectura. Para William Curtis se trata de un asunto 'jurídico, no arquitectónico'. 'El Prado necesita esa reforma, en la organización de las entradas y en la colección'.