Más de la mitad de los ciudadanos argentinos vive en la pobreza

Más de la mitad de los 36 millones de habitantes de Argentina vive en condiciones de pobreza, según un informe del Gobierno difundido ayer. Un total de 18.219.000 personas, lo que representa el 51,4% de la población, 'viven en la pobreza', precisa el trabajo. De ese total de pobres, 7.777.000 son indigentes, es decir, que no tienen recursos para satisfacer sus necesidades mínimas de alimentación.

El informe, elaborado a partir de datos de mayo pasado por un organismo dependiente de la Presidencia, constata que la pobreza golpea con más fuerza a los niños y adolescentes, pues de los 12,5 millones de habitantes menores de 18 años, el 66,6% son pobres. El trabajo, publicado ayer por el diario Clarín, subraya que la indigencia está creciendo a 'un ritmo más intenso' que el de la propia pobreza y añade que en 1998 el 28,9% de los pobres era indigente, porcentaje que llegó al 42,6% el mes pasado.

La pobreza es un fenómeno en ascenso desde 1994 y dio un enorme salto a partir de mediados de 1998 para continuar en constante alza a medida que se ha ido profundizando la crisis económica en que está sumida Argentina.

En octubre de 1998, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) reconocía que el 32% de la población argentina vivía en condiciones de pobreza y que en el mismo mes del año pasado el número había subido a poco más del 40%. El director del Indec, Juan Carlos del Bello, calculó el mes pasado, de acuerdo con los índices de desempleo, que cerca de la mitad de la población vive por debajo de la línea de pobreza.

Desempleo

El desempleo en Argentina afecta a alrededor del 25% de la población activa (entre 18 y 65 años) y otro porcentaje similar sólo accede a trabajos temporales, lo cual comprende algo más de cinco millones de personas. Para asistir a los desempleados, el Gobierno ha puesto en marcha a principios de junio un programa con subsidios por 150 pesos (42,8 dólares) mensuales que beneficia a cerca de un millón de jefes de familia.

El Indec califica como pobre a una familia tipo (matrimonio con dos hijos) que gana en conjunto menos de 626 pesos (unos 179 dólares) al mes, e indigente al grupo familiar que percibe menos de 266 pesos (76 dólares) mensuales. El salario promedio ronda los 450 pesos (129 dólares), prácticamente el 25% menos de lo que el organismo de estadística calcula que cuesta para una familia tipo la llamada cesta básica de alimentos.