El consejero delegado del Fórum 2004 asegura que el evento se afianzó tras la cumbre de Barcelona

Jaume Pagès, nacido en Girona hace 56 años, aceptó en el mes de abril el cargo de consejero delegado del Fórum de las Culturas que se celebrará en Barcelona en verano de 2004. Un reto complicado tras las dimisiones sucesivas de sus dos antecesores en el cargo, Jaume Sodupe y Josep Caminal. Desde septiembre, el Fórum ha vivido cierta zozobra al no contar con un responsable en la cúspide. Ahora, Pagès se manifiesta esperanzado, aunque no oculta que el evento está todavía por definir. Sin embargo, piensa que el comportamiento de los barceloneses durante la cumbre europea de marzo pasado ha afianzado el proyecto. 'Esa cumbre colocó al Fórum en la recta final. Si se hubieran producido incidentes como los de Génova durante la reunión del G-8, el Fórum se hubiera tenido que suspender'.

'Es difícil que la gente se motive con este encuentro si antes no hemos explicado de qué va la cosa. Los Juegos Olímpicos se vendieron solos, pero esto es distinto', reconoce. Confía, sin embargo, en que, una vez definidos dichos contenidos y expuestos públicamente, cosa que empezará a ocurrir el mes que viene cuando se presente el anteproyecto de programación, la gente se involucrará.

Hasta ahora están cerrados acuerdos con patrocinadores por 18 millones de euros, pero el presupuesto contempla un total de 90. Además, prevé que el recinto donde tendrán lugar los actos, en el frente marítimo junto al río Besòs, será visitado por cinco millones de personas, lo que reportaría otros 90 millones de euros. 'Son cifras difíciles de conseguir, aunque no imposibles. A partir de que se conozca la programación habrá más apoyos'.

Sobre los contenidos del encuentro, el consejero delegado avanza: 'El Fórum tendrá cuatro ámbitos básicos: uno será el de la reflexión a través de las diversas exposiciones que se celebrarán tanto en el recinto del Besòs como en otros centros culturales de la ciudad. Un segundo ámbito vendrá dado por los debates, simposios y congresos en los que se discutirá sobre tres ejes básicos: la paz, la diversidad cultural y la sostenibilidad. El tercero estará determinado por el intercambio de experiencias de todo el mundo que se escenificarán en la gran explanada [de 16 hectáreas] del Fórum. El último espacio será la fiesta, representada por el Festival de las Artes que tendrá lugar a lo largo de los cinco meses que durará el evento [del 9 de mayo al 24 de septiembre de 2004]'.

Pagès considera que la cohabitación de tres administraciones de signo político distinto en la cúpula del Fórum -el Gobierno central, la Generalitat de Cataluña y el Ayuntamiento de Barcelona, cada una con una aportación de 60 millones de euros- forma parte de la misma esencia de la convocatoria. 'Las tres administraciones son democráticas y confían en la palabra para solucionar los problemas. El Fórum no resolverá conflictos como el de Oriente Próximo o el del País Vasco, pero puede aportar una luz nueva, al enfocarlos desde el punto de vista del diálogo cultural'.