Empresas mexicanas vetan a las azulejeras valencianas por exportar a precio inferior al coste

El Gobierno mexicano ha iniciado un expediente antidumping con el fin de esclarecer si cinco empresas cerámicas valencianas están vendiendo su producto por debajo del coste y, con ello, causando un daño a los fabricantes nacionales. La denuncia, promovida por tres firmas mexicanas que abarcan el 65% de la producción, si no se archiva, implicará la imposición de una tasa que encarecerá la exportación hasta que en 2003 se determine si hay competencia desleal.

El presidente de la patronal cerámica, Ascer, Fernando Diago, y el secretario general de la asociación, Pedro Riaza, aseguraron que las acusaciones son 'rebatibles' y que 'no se sostienen'. Riaza, no obstante, señaló que la denuncia se basa en una 'argumentación seria'. Ambos mostraron cautela al destacar que éstas son las conclusiones extraídas de un examen preliminar de la situación. Ninguno quiso hablar de la posibilidad de un veto comercial, aunque ambos subrayaron la dimensión de las empresas promotoras de la denuncia y su capacidad 'financiera y política'. Diago incluso descartó que el expediente responda a una decisión política ya que, según dijo, 'su apertura no habría coincidido con la visita de Fox a España'. Aún así, resaltaron que las tres productoras mexicanas abarcan el 65% de la producción nacional, mientras que España concentra el 80% de la importación de baldosas cerámicas al país centroamericano, con una facturación de más de 48 millones de euros.

Las consecuencias del inicio de este expediente van desde el cierre de la investigación hasta la imposición de unas tasas compensatorias al producto español mientras dure la investigación, que culminará en marzo de 2003, fecha en la que se deberá determinar la existencia o no de esta práctica de competencia desleal.

Las empresas sobre las que recaen 'indicios suficientes' para la apertura del expediente, tal como señala la resolución de la Secretaría de Economía del Gobierno mexicano, son Halcón Cerámicas, Stylnul, Salón, Ballesmar y Garogrés. Según sostuvo el secretario de la patronal cerámica, la inclusión de alguna de ellas se debe a un error, mientras que en los otros casos, 'del primer examen no se deduce que haya habido ninguna actuación que sostenga una acusación de dumping'.

La denuncia ha sido interpuesta por las productoras mexicanas Lamosa, Porcel y Vitromex y por la distribuidora Porcelanite, que aseguran haber comprobado los precios de venta de las empresas de enero a junio de 2001, período en el que afirman se produjo la competencia que les perjudicó. Además de las españolas, acusan a cinco firmas importadoras en México.

El problema es que la investigación no se centra en estas cinco industrias, sino que se realiza sobre el total de las exportaciones de baldosas cerámicas españolas a México. Así, será la patronal la que realice las alegaciones a la denuncia, para lo que tiene un plazo de 30 días. Si tras el estudio de las alegaciones, la denuncia se mantiene, se abrirá una investigación durante la que la Administración mexicana puede imponer unas tasas compensatorias hasta marzo de 2003. Estas cuotas no están prefijadas, ya que, en teoría, han de servir para compensar el daño que se pueda estar haciendo a los productores locales. Esta tasa se sumaría al arancel que ya pagan los productores de cerámica españoles, un 10%.

En cualquier caso, la patronal mantiene dos esperanzas para una resolución previa, incluso, a la tramitación de la denuncia. La primera, que una decisión política frene la acusaciones y dé marcha atrás al proceso, y la otra, que en la comprobación de la resolución se encuentre un defecto de forma que permita paralizarla.

La esperanza en la decisión política se basa en el breve encuentro que el presidente de los fabricantes de cerámica y el presidente de México, Vicente Fox, mantuvieron el jueves en Valencia. El primero expuso el problema al segundo que, según dijo Diago, se comprometió a 'tratar de resolver' el conflicto.

Fernando Diago y Pedro Riaza explicaron ayer que el mercado mexicano se sitúa en el ranking de los diez principales países de destino de las exportaciones de azulejos españoles. Riaza destacó que las ventas a ese país se remontan a muchos años atrás y que se estancaron en 1994. 'Desde entonces, no hacemos sino ir recuperando la cuota de aquel año', indicó. Durante 2001 las exportaciones a México aumentaron casi un 19%, respecto al año anterior, con una facturación de 48.240.381 euros.