Interceptados 110 inmigrantes, entre ellos un bebé y 38 mujeres, en Tarifa y Fuerteventura

La Guardia Civil localizó ayer a 92 inmigrantes indocumentados (65 subsaharianos y 27 magrebíes) en dos operaciones llevadas a cabo en las costas de Tarifa (Cádiz). Entre los componentes de este contingente se encontraban un total de 38 mujeres, algunas de ellas embarazadas, y un bebé de corta edad. Un grupo de 18 inmigrantes subsaharianos también fue interceptado de madrugada cuando se aproximaba a las costas de Fuerteventura a bordo de una patera. Mientras, el presidente del Gobierno anunció ayer cambios en la Ley de Extranjería para facilitar las expulsiones.

Quedaron atrás los díez días de mal tiempo, que han dificultado la navegación, y volvieron las pateras. A dos millas de Guadalmesí, en las proximidades del término de Tarifa, fue interceptada ayer la primera nave, en la que iban 59 personas, de las que 27 eran magrebíes y el resto subsaharianos. 22 de los viajeros eran mujeres. Algunas de ellas están embarzadas, aunque aún no se ha podido precisar cuántas.

Además de las mujeres embarazadas, también recibieron asistencia sanitaria algunos inmigrantes que presentaban síntomas de hipotermia y cansancio a causa de la travesía desde la costa norteafricana.

La segunda de las expediciones localizada en la costa gaditana fue interceptada en la playa de Bolonia. Un grupo compuesto por 33 personas (16 hombres, 16 mujeres y un bebé) alcanzó la costa a bordo de una pequeña embarcación neumática tipo zódiac. El bebé y su madre fueron trasladados al hospital Punta Europa algecireño. La última vez que se localizaron inmigrantes en el Campo de Gibraltar fue el pasado 28 de abril.

También llegó una patera a Canarias, donde la Guardia Civil la detectó sobre las 2.30 de ayer con 18 inmigrantes subsaharianos que navegaban cerca de Fuerteventura. El patrón de la embarcación pasó a disposición judicial acusado de un delito contra los derechos de los extranjeros.

Expulsión lenta

Mientras, el presidente del Gobierno, José María Aznar, asegura en una entrevista publicada ayer por La Razón que 'en el futuro será necesaria una nueva ley de inmigración'. El jefe del Ejecutivo se refiere a la unión entre inmigración y delincuencia y dice: 'Es verdad que el 89% de las personas que han ingresado en prisión en los tres primeros meses de 2002 eran extranjeras. Lo que pasa es que los procedimientos de expulsión que tenemos no son suficientemente rápidos. Además de resolver el trámite parlamentario para que podamos legalmente acelerar la expulsión de delincuentes extranjeros, el Gobierno está estudiando si procede realizar reformas en la Ley de Extranjería'. Aznar asegura que en España se ha pasado 'en poco tiempo' del 1,5% de la población al 4%. 'Y en ciudades como Madrid nos acercamos nada menos que al 10%', añade..

El presidente del Gobierno también pide al Gobierno de Marruecos que ponga 'todo su esfuerzo' para evitar la infiltración de menores en Ceuta y Melilla y se acabe con la situación de estos niños 'cuanto antes'.