Un hombre confiesa que mató a golpes a su esposa en Linares

Ahmed Zahoor, el hombre de 47 años detenido el domingo en Linares (Jaén) por la muerte de su esposa, confesó ayer la autoría del crimen. Los vecinos calificaron de habituales las palizas y dijeron que la mujer, Ángela Córdoba, de 36 años, las ocultó por temor a perder la custodia de sus hijas, de dos años y cinco meses. Otro hombre quedó ayer en libertad con cargos tras ser detenido por la muerte de su novia en Granada.

Ahmed Zahoor, de 47 años, esperaba ayer que el Juzgado de Instrucción número 4 ordenase su ingreso en prisión. El comisario de policía de Linares, Gabino Gutiérrez, informó ayer de que fue el propio acusado quien se dirigió a unas vecinas del bloque para que éstas avisaran a la policía. Cuando los agentes llegaron al domicilio de la familia, en el número 20 de la calle de El Pilar, en Linares, encontraron a la niña de dos años abrazada al cuerpo de su madre y al marido junto al cadáver. La niña de cinco meses estaba dormida en la cuna con un biberón de leche que su madre se disponía a darle antes del trágico desenlace. El marido no opuso resistencia y, según fuentes policiales, presentaba síntomas de estado de embriaguez cuando fue detenido.

La víctima presentaba varios hematomas en la cabeza pero ningún rastro de sangre, por lo que se cree que su muerte se debió a alguno de los golpes que recibió en el cráneo. En todo caso, este extremo estaba pendiente de ser confirmado por la autopsia.

Según los testimonios de los vecinos, las relaciones entre la pareja eran turbulentas en los últimos tiempos. La noche anterior a la discusión que acabó con la vida de Ángela Córdoba, el acusado había echado de la casa a la mujer y a sus dos hijas, que habían tenido que refugiarse de la lluvia en el portal. Ya el domingo, minutos antes de las cuatro de la tarde, vecinos del inmueble recordaban haber oído gritos de la mujer.

Bolsa en la cabeza

El crimen de Linares sucedió a la muerte de otra mujer en Granada. La policía puso ayer a disposición judicial a G. Y.-R. T., detenido después de que el cuerpo de su novia, francesa y de 22 años, fuese hallado en su apartamento con una bolsa de plástico cubriéndole la cabeza y atada con un pañuelo.

El hombre alegó que la mujer se había suicidado encerrada en el cuarto de baño tras una discusión durante la noche del viernes. Según el detenido, tras extrañarse de la tardanza de la mujer, entró en el cuarto de baño del apartamento que ambos compartían y halló a su novia inconsciente con una bolsa de plástico en la cabeza. Después de tumbarla en una cama para intentar reanimarla, decidió pedir ayuda. La policía, que encontró sospechosa la hipótesis del suicidio, decidió detenerlo el pasado viernes para tomarle declaración.

El joven pasó ayer a disposición del Juzgado de Instrucción número 5 de Granada, donde declaró desde las 13.00 hasta las 20.00. El juez ordenó la puesta en libertad sin fianza y con cargos del joven, quien queda como imputado y a expensas de lo que determine la investigación judicial. El sospechoso tendrá que presentarse cada 15 días en el juzgado.