La hostelería pugna en Tarragona por acabar con la hegemonía del transporte

La Cámara de Tarragona se enfrenta dividida a las elecciones. Tras el anuncio del actual presidente, Jaume Carreras, del sector del transporte, de no optar a la reelección y la imposibilidad de presentar una candidatura común, los 34 miembros del pleno que surjan de la votación de las más de 22.000 empresas censadas, más los cinco elegidos por las patronales, deberán optar entre el hotelero Jaume Ferrer y el presidente de la patronal Pimec-Sefes y comerciante, Rafael Tatay.

A las 34 vocalías de la cámara se han presentado 55 candidaturas, una muestra, a juicio de Tatay, del dinamismo del que se ha impregnado el organismo en los cuatro últimos años. Tatay, que cuenta con el visto bueno de la Unió de Botiguers de Tarragona, entidad de la que fue presidente, considera que una de las luchas en que más se debe insistir desde la cámara es en las carencias, casi endémicas, existentes en materia de infraestructuras en la zona.

La irrupción de Ferrer en las elecciones, después de que se especulara con la presentación de una candidatura pactada, ha acrecentado los temores de la reproducción, en la cámara, de un debate que se encendió hace un año con el intento de constitución del Consorcio de la Química y que supuso la inmediata reacción del sector turístico, representado por Ferrer en el debate sobre el supuesto favoritismo de las administraciones hacia la química respecto del turismo.

En Tortosa, el debate del agua del Ebro lo salpica todo. La cámara de comercio no se sustrae a él y las elecciones se presentan más reñidas que nunca. El actual presidente, Valentí Faura deberá enfrentarse a la proliferación de candidaturas presentadas por sectores empresariales afines al movimiento antitrasvase. Los 11.072 afiliados a la entidad deberán escoger 25 vocalías a las que se han presentado 44 candidaturas. La oposición se articula entorno a Rafael Lluís, presidente de la patronal de les Terres de L' Ebre y exdirigente convergente, cuya militancia antitrasvase le hizo abandonar a la familia convergente.

En la cámara de Reus, Francesc Cabré se encontraría como presidente nuevamente tras 32 años si no prosperara ninguna candidatura alternativa a la suya, de amplio respaldo.Como oposición se postula Jordi Savall, presidente de los empresarios de Cambrils.

En la cámara de Valls, la situación está tranquila. Es la más pequeña de la provincia, con un pleno de 19 miembros y poco más de 2.500 empresas representadas para decidir al presidente que sustituirá a Josep Manuel Ulldemolins. Un nombre que suena cons fuerza es el de Antonio Bastús, director de Firagost.