_
_
_
_
_
CUMBRE DE BARCELONA

La policía interviene mazos y bates de béisbol en la frontera a grupos que iban a la 'eurocumbre'

Los agentes impiden el paso a España de un centenar de manifestantes y 1.500 inmigrantes

Mazos de albañil, bates de béisbol, hachas o tubos huecos para lanzar cohetes forman parte del arsenal que la Policía Nacional localizó en los vehículos de algunos de los grupos que intentaron pasar por la frontera de La Jonquera. Estos utensilios estaban depositados en los maleteros de vehículos particulares y la policía no tiene duda de que estaban destinados a ser usados en las manifestaciones de Barcelona. Desde que se establecieron los controles, los agentes han impedido el paso a un centenar de personas que presumiblemente iban a manifestarse y a más de 1.500 inmigrantes en situación irregular. El Colegio de Abogados de Barcelona advirtió ayer de que 'no puede limitarse la libre circulación de personas sin justificación'.

Más información
Francia exige fuertes garantías para liberalizar el mercado energético
26 detenidos en los actos antiglobalización previos a la marcha del sábado
La UE acuerda la apertura del mercado energético para el año 2004
Participación 2001:: Globalización y Antiglobalización

El comisario de la Policía Nacional de La Jonquera, José Manuel Escriche, aseguró que muchas de las personas interceptadas han intentado cruzar las fronteras españolas en varias ocasiones, aunque el férreo dispositivo ha impedido que encuentren una rendija. La suspensión de las garantías de Schengen y la impermeabilización de la frontera catalano-francesa recuerdan a los más viejos del lugar la época de los maquis que combatían con las armas al franquismo. 'Tenemos la conciencia muy tranquila respecto a las personas a las que se ha impedido la entrada al país, porque no tenemos ninguna duda de que iban a Barcelona para reventar las manifestaciones', aseguró el comisario.

Entre los objetos requisados se hallaron también pedazos de cuerdas de gran diámetro con el interior relleno de plomo, claramente destinados a ser usados como porra. Escriche asegura que la tarea policial debe ser valorada por los manifestantes antiglobalización, puesto que intenta apartar de sus convocatorias pacíficas a los elementos alborotadores. Los controles selectivos establecidos en los puntos fronterizos gerundenses de La Jonquera, Puigcerdà, Portbou y Camprodón están integrados por un centenar de policías a los que se suma el apoyo de la Guardia Civil y los Mossos d'Esquadra.

Hasta ayer, aproximadamente un centenar de supuestos activistas violentos han visto como se les negaba la entrada por las fronteras de las comarcas de Girona, principalmente en La Jonquera. Ni uno solo de ellos ha requerido los servicios del equipo jurídico que ha dispuesto la comisión de Derechos Humanos del Colegio de Abogados de Girona, puesto que una reclamación formal en la que denuncien alguna supuesta vulneración de sus derechos les impediría intentar el paso por otro punto fronterizo.

La policía puede impedir la entrada a ciudadanos extranjeros que dispongan únicamente del documento de identidad de su país; pero que no tengan el pasaporte en regla. El Colegio de Abogados de Barcelona apoyó ayer la postura de los letrados de Girona indicando en un comunicado que la suspensión de los acuerdos de Schengen 'no puede en ningún caso justsificar restricciones al derecho a la libre circulación de personas', de forma individual o colectiva, basada en 'simples sospechas respecto a posibles conductas peligrosas'. No obstante, de momento, quienes han sufrido en mayor medida los férreos controles policiales son los inmigrantes sin papeles.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El dispositivo especial de seguridad alcanza también al Pirineo leridano, donde se ha desplegado otro centenar de policías y guardias civiles para controlar los pasos fronterizos del Alt Urgell y de la Val d'Aran. La Subdelegación del Gobierno en Lleida no ha querido facilitar información relacionada con la seguridad, pero otras fuentes han asegurado la presencia en el Pirineo de dos secciones de los Grupos Rurales de Seguridad (GRS) de la Guardia Civil procedentes de Zaragoza. Estos agentes realizan controles móviles en los pasos fronterizos de la zona, especialmente en la N-145, entre Andorra y La Seu d'Urgell, y en la N-230, entre Vielha y la frontera francesa, además de otras vías secundarias. Además, existen controles fijos y se vigila los vehículos que entran en España por la aduana de La Farga de Moles y por los pasos del Portillón y de Les.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_