Los sindicatos dicen que la banca ha dejado de ingresar 340 millones a la Seguridad Social
Los trabajadores piden que se paguen las horas extra y convocan 22 manifestaciones
La práctica totalidad de los sindicatos de bancos y cajas presentaron ayer un escrito ante los grupos parlamentarios en el que acusan al sector de dejar de ingresar 340 millones de euros (56.662 millones de pesetas) por las 33 millones de horas extra realizadas en 2001 y la primera semana de enero, que no han sido declaradas ni remuneradas. La llegada del euro ha colmado la paciencia de los sindicatos, que denuncian las habituales prolongaciones de jornada en el sector, por lo que han covocado manifestaciones el 30 y el 31 de enero en 22 capitales de provincia.
Los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO), Unión General de Trabajadores (UGT), Confederación General de Trabajadores (CGT), Confederación Sindical Independiente de Cajas de Ahorros (CSICA) y Confederación de Cuadros, presentes en bancos, cajas de ahorros y cooperativas de crédito denunciaron 'la práctica habitual de prolongar la jornada de trabajo por encima de los límites establecidos en los convenios colectivos sin compensación alguna ni económica ni en tiempo libre, que está alcanzando cotas inimaginables'. Esta denuncia conjunta supone una unidad de acción que no se lograba desde 1983.
Por su parte, bancos y cajas creen que esta situación se debe solucionar entidad por entidad y no presionar a todo el sector en su conjunto. Además, niegan que se realicen tantas horas extra.
Coste laboral
Según los cálculos sindicales, en 2001 se hicieron 31 millones de horas extra sin remunerar y en la primera semana de enero dos millones más. Si bancos y cajas hubieran remunerado estas jornadas, el coste laboral para ellos hubiera sido de 1.020 millones de euros (169.714 millones de pesetas). Según los sindicatos, de haberse remunerado estas horas, la Seguridad Social habría ingresado 340 millones de euros.
En el escrito enviado a los grupos parlamentarios, se les pide que interpelen al Gobierno sobre las medidas que adoptará para impedir el fraude que están causando las entidades a la Seguridad Social por el impago de las cotizaciones de horas extra no declaradas. Además, en esta misiva, los sindicatos también piden a los parlamentarios que requieran al Ejecutivo para que aporte soluciones a la vulneración de los convenios colectivos del sector y del Estatuto de los Trabajadores.
Los representantes de los trabajadores han pedido a la AEB (patronal de los bancos), ACARL (representante de las cajas) y a la Patronal de las Cooperativas de Crédito que se refuercen las sucursales con nuevas contrataciones, así como que se compense el esfuerzo colectivo que se está realizando con una paga extra de 1.000 euros y seis sábados libres en la banca o seis días en las cajas, ya que éstas cierran los sábados. Además se exige que, a partir de ahora, se remuneren las horas extra realizadas en la transición al euro.
Los sindicatos aseguran que han intentado negociar con bancos y cajas, pero su negativa ha sido casi absoluta, 'aunque con algunas excepciones, como Barclays o el Banco Atlántico', según María Jesús Paredes, de CC OO. Como medida de presión, han convocado movilizaciones en 22 ciudades españolas el próximo 30 y 31 de enero. Los sindicatos no descartan convocar medidas 'más contundentes', como un paro general, en próximas fechas, apuntó Paredes.
Juan Sánchez, secretario general de FES-UGT, dijo que la falta de un acuerdo sectorial y la negativa a negociar por parte de las entidades demuestra 'el desprecio más absoluto a los sindicatos y trabajadores' y emplazó a los trabajadores y, en particular a los técnicos, a secundar la protesta para frenar 'esta escalada de abusos'.
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