Soria dice que una ley autonómica no puede regular su investigación

El científico Bernat Soria, director del Instituto de Bioingeniería de la Universidad Miguel Hernández de Elche, que investiga el uso de células madre en posibles tratamientos contra la diabetes, afirmó ayer que una legislación autonómica no puede reglamentar sus trabajos, 'ya que debe ser una norma estatal la que regule la materia'. Soria confía en que el Ejecutivo central tome una decisión sobre la posibilidad de desarrollar su investigación en España y recordó su decisión de abandonar el país en caso contrario.

Bernat Soria explicó ayer que la Generalitat no tiene competencias para reglar las investigaciones que en la actualidad realiza (la aplicación de las células embrionarias a la enfermedad de la diabetes). El científico de la Miguel Hernández, que saltó a la fama el pasado año tras hacerse público el contenido de sus trabajos, y reabrió el viejo debate entre la ética y ciencia, recordó que la tarea de legislar sobre el tema es del Gobierno central.

En este momento existe un vacío legal en materia de utilización de células madre, por lo que es el Ejecutivo de Madrid el que debe decidir si Soria puede continuar sus investigaciones en España. El científico afirmó comprender este vacío legal, 'ya que ningún legislador es capaz de redactar leyes con diez años de antelación, porque las situaciones que se están dando ahora no estaban previstas', pero mantiene su decisión de marcharse al extranjero si finalmente el permiso le es denegado. De cualquier forma, Soria manifestó su confianza en que 'las autoridades científicas y sanitarias hagan la mejor interpretación posible de la ley'. El investigador tiene previsto reunirse el jueves con Serafín Castellano, consejero de Sanidad, para tratar el asunto. Además, participará en una conferencia sobre ética y clonación en la capital de la Comunidad ese mismo día.

Las investigaciones sobre células madre humanas se basan en la teoría, no la certeza, de que estas células posibilitan la creación de cualquier tipo de tejido. De esta forma, controlar su reproducción permitiría sustituir cualquier célula dañada y acabar así con numerosas afecciones que en la actualidad no tienen curación. El proyecto de Soria persigue la sustitución de las células dañadas por la enfermedad de la diabetes tipo 1. En concreto, el investigador trata de controlar las células del páncreas, es decir, las productoras de insulina, sustancia de la que carecen los afectados por esta enfermedad (unas 3.000 personas al año en España). La legislación española prohíbe el desarrollo de embriones humanos así como su utilización, por lo que hasta ahora el científico de la UMH ha adquirido las células embrionarias en Alemania. Mientras tanto, alrededor de 30.000 embriones españoles permanecen congelados sin que el Gobierno haya optado todavía por destruirlos o por utilizarlos para investigaciones.

El debate ciencia-ética no se ha hecho esperar. El arzobispo de Valencia, Agustín García-Gasco, ha reclamado que se obtengan las celulas madre mediante un sistema diferente a la reproducción de embriones. Por su parte, las asociaciones de enfermos de diabetes defienden a ultranza el trabajo del profesor de la UMH y lamentan la posibilidad de que éste abandone el país.