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El Ministerio de Agricultura intentará negociar fórmulas para reabrir el mercado de cítricos en EE UU

El lunes próximo, responsables del Ministerio de Agricultura se reunirán con sus homólogos del departamento agrario de Estados Unidos para intentar levantar el veto que pesa sobre las clementinas españolas desde hace un mes.

El ministerio, según ha podido saber este periódico, está barajando fórmulas que eviten que el cierre se mantenga y, entre ellas, podrían negociar que el cierre de los mercados a los cítricos españoles se centre exclusivamente en los estados del sur, donde hace un mes se decretó, junto al veto exportador, la retirada de las clementinas de los puntos de venta. El endurecimiento de la inspección o la ampliación de la cuarentena son otras de las opciones que se podrían plantear en esta negociación con el objetivo de reabrir las fronteras estadounidenses a la entrada de cítricos.

Con todo, el parón exportador decretado hace un mes por el departamento de Agricultura de Estados Unidos (Usda) ha arruinado la actual campaña de comercialización citrícola a este país. Un desenlace difícil de prever meses antes, ya que el sector esperaba colocar en el país norteamericano 100.000 toneladas de clementinas, casi 20.000 toneladas más que en la campaña 2000-2001. El mercado norteamericano no es el principal destino de los cítricos españoles pero prestigia un producto y puede ayudar a abrir mercados históricamente más reticentes, como el japonés o el chino. Además, absorbe una parte importante de la producción de clementinas. Su cierre podría provocar un efecto dominó en otros países.

La decisión de Estados Unidos, por el momento, continúa en el aire. El sector está luchando desde hace un mes por mantener su presencia en un mercado prioritario. Además, considera que, con independencia del desenlace de la crisis, Estados Unidos debería indemnizar las pérdidas que ha provocado con una decisión que consideran injustificada.

Estados Unidos decidió a principios de diciembre el cierre de sus fronteras a las clementinas españolas. Una medida que justificó por la detección de larvas de mosca del Mediterráneo (ceratitis capitata) en algunas frutas. La información procedente del país ha sido desde el primer momento escasa y confusa, y una carta enviada a principios de diciembre por el Usda informaba de que se habían encontrado larvas vivas en fruta etiquetada por una firma norteamericana.

Desde el primer momento, el sector citrícola ha insistido en que el protocolo de exportación con Estados Unidos -con inspecciones en origen y destino y cuarentena de frío- hace prácticante imposible la supervivencia de larvas vivas en la fruta que llega a ese país. Por eso, el veto se considera una consecuencia directa de la presión de los productores citrícolas locales.

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