El gasto español en I+D permanece en los últimos puestos de la UE
Sólo Grecia y Portugal invierten menos que España en ciencia
La Unión Europea en su conjunto mantuvo el pasado año el esfuerzo en I+D de 1999. Los datos provisionales de Eurostat indican que, el año pasado, el gasto de I+D en la UE supuso el 1,90% del PIB (Producto Interior Bruto). España mantiene ese porcentaje en el 0,90%, lo que le sitúa sólo por delante de Grecia y Portugal, aunque los esfuerzos de este último país pueden dejar a España pronto en penúltimo lugar.
La Unión Europea hizo un enorme esfuerzo en 1999 para recuperar el nivel de inversión en investigación y desarrollo (I+D) de los primeros años noventa, aumentando el gasto en un 5,6% y situándolo en el 1,92% del PIB. Los datos provisionales señalan que en 2000 el esfuerzo ha sido menor (sólo un 2,3% de aumento en precios constantes), pero no negativo. El resultado sigue siendo pobre, a ojos de la Comisión Europea, que intenta convencer a los países miembros de la UE de que inviertan más en este campo y se sitúen en los niveles de Estados Unidos (2,64% en 1999) y Japón (3,4% en 1999).
'Sólo los países nórdicos mantienen unos porcentajes incluso mayores que los que se registran en Japón y Estados Unidos, y se mantiene un enorme desequilibrio dentro de la UE entre el norte y el sur. Pero nosotros no podemos hacer nada, salvo seguir presionando a los países miembros para que aumenten sus inversiones', dice una fuente de la Comisión Europea.
Los países que más apostaron por la investigación en 1999 fueron, efectivamente, los nórdicos (3,80% Suecia y 3,19% Finlandia), seguidos por Alemania (2,44%) y Francia (2,19%). En la cola quedan Grecia (0,51%), Portugal (0,76%) y España (0,89%).
Los primeros datos referidos a 2000 indican que tales porcentajes se mantienen casi en los mismos términos, aunque Eurostat destaca que Finlandia y Portugal son los países cuyo crecimiento en I+D viene siendo más ambicioso. Concretamente, Portugal está aumentando sus presupuestos en este campo en un 12% anual en precios constantes. España, en cambio, mantiene prácticamente el mismo porcentaje en los últimos tres años, aunque ciertamente hubo en 1998 un avance significativo al pasar del 0,82% al 0,90%.
La Unión Europea gastó en su conjunto durante el pasado año 161.000 millones de euros, lo que supuso un 5% más que en 1999. El número de personas que trabajan en I+D aumentó, sin embargo, en un porcentaje menor (0,9%). Los datos de ese año indican que un total de 1,7 millones de europeos trabajan en este sector a tiempo completo, lo que significa un total de 2,3 millones de personas involucradas en esta actividad.
Si en vez de comparar los gastos relacionados con el PIB se comparan los gastos por persona, las disparidades en Europa aumentan notablemente. Frente a 209 unidades de gasto por persona en Suecia, España sólo gastó 38, y Grecia, 16. Sobre este baremo, si siquiera Suecia supera a Estados Unidos (218 por persona).
Eurostat ha desmenuzado también el gasto en I+D para conocer la tendencia de la investigación estatal y privada. Este análisis viene a demostrar la pujanza de las empresas privadas en España en relación a este asunto, pues mientras que en Portugal y en Grecia la inversión privada es todavía muy débil, lo cierto es que España mantiene un porcentaje que se acerca más a la media comunitaria.
En toda la UE la inversión empresarial en I+D es el 66%, la estatal es del 14% y la que se registra en la enseñanza superior, del 20%. Estos datos son en España similares: 54% de las empresas, 17% del Estado y 30% de la Universidad. En Portugal y en Grecia, sin embargo, el porcentaje de gasto de la iniciativa privada sólo alcanza el 25% y el 26%, respectivamente.
Bélgica, Suecia e Irlanda se distinguen por ser los países que menos dinero público invierten en I+D, lo que no se considera positivo, dado que sólo el gasto público se suele dedicar a investigación básica.
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