_
_
_
_
_

El Congreso elige magistrado del Constitucional a García Calvo con votos de castigo del PSOE

El Parlamento renovó también parte del Consejo del Poder Judicial y del Tribunal de Cuentas

El pleno del Congreso eligió ayer la parte que le correspondía de la nueva composición de los órganos institucionales pendientes de renovación -Tribunal Constitucional, Consejo General del Poder Judicial y Tribunal de Cuentas-, con un levísimo voto de castigo para el magistrado Roberto García Calvo, promovido por el Partido Popular para el Tribunal Constitucional. García Calvo obtuvo 20 votos menos que el candidato que resultó más apoyado para ese mismo órgano, Javier Delgado Barrio, hasta ahora presidente del Consejo del Poder Judicial y del Tribunbal Supremo.

Más información
La indisciplina de voto sembró el temor a otra ruptura del pacto
De mal en peor
El magistrado García Calvo defiende para los terroristas el cumplimiento íntegro de penas
El rechazo socialista a un juez que ocupó cargos en el franquismo rompió el acuerdo con el PP
El Congreso avala la idoneidad de los candidatos al Tribunal de Cuentas

El Congreso eligió ayer por fin a cuatro nuevos magistrados del Tribunal Constitucional, a diez vocales para el Consejo General del Poder Judicial y a seis consejeros para el Tribunal de Cuentas. El ex ministro socialista Luis Martínez Noval, al que había puesto reparos el PP por su acentuado perfil político, obtuvo 297 votos, 12 menos que el candidato más apoyado para ese órgano, Ramón Álvarez de Miranda, que recibió 309 sufragios. Los miembros que completarán la nueva composición de los citados órganos serán elegidos por el Senado el próximo 7 de noviembre.

Los votos blancos y nulos procedieron de Izquierda Unida, PNV, Grupo Mixto y CiU, en disconformidad por haber sido excluidos de las negociaciones para seleccionar candidatos, pero la unión de PP, PSOE y Coalición Canaria aportó la mayoría requerida -tres quintas partes de la Cámara- para la elección de esos órganos.

Medio año de negociación

Después de medio año de negociaciones para la provisión de los tres órganos constitucionales y de diez meses, desde que el PP y el PSOE empezaron la negociación sobre el Tribunal de Cuentas, cuyos miembros terminaron su mandato en diciembre de 2000, populares, socialistas y nacionalistas canarios dieron por terminado un proceso que ha resultado tormentoso y repleto de descalificaciones y rupturas. Las votaciones duraron ayer tres horas al realizarse en urna, por llamamiento individual y con papeleta. Hubo votación específica para el Constitucional y para el Tribunal de Cuentas, e incluso fue diferenciada para los candidatos al CGPJ propuestos por las asociaciones judiciales y para los promovidos por los dos principales grupos parlamentarios.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La tardanza en la elección parlamentaria ha exasperado en cierta medida al mundo judicial, que tuvo que elegir a sus candidatos en pocos días, porque los políticos señalaron como objetivo alcanzar un acuerdo global en julio. El nuevo modo de elección del CGPJ -vocales seleccionados por las asociaciones judiciales, además de los escogidos por los parlamentarios- se presentó como uno de los grandes logros del Pacto por la Justicia.

Pero ese acuerdo y la elección de los miembros del órgano de gobierno de los jueces se mezcló con la discusión sobre la renovación del Tribunal Constitucional y del Tribunal de Cuentas. Los intentos del PSOE para desgajar la negociación, toda vez que para el CGPJ pronto hubo acuerdo, no fructificaron y el PP impuso su esquema de trabajar sobre 'un paquete'.

Exclusión del PNV

Pero a medida que transcurría el tiempo brotaron nuevos problemas. Así, entró en discusión la composición del CGPJ por la exclusión del PNV, ya que el PP se negó a aceptar a la candidata de ese partido, la diputada Margarita Uría, aceptada por el PSOE. CiU también elevó su protesta, porque para el Tribunal Constitucional los dos partidos mayoritarios decidieron que Eugenio Gay Montalvo podía ser un candidato de consenso de todos los grupos. La dirección de CiU negó que Gay fuera su candidato, por lo que ayer sus diputados votaron en blanco. Pero no todos. Algunos aseguraron a este periódico que 'dos o tres votaron a Gay'.

Otros elementos complicaron el logro de un pacto definitivo, como fue la retirada de la candidatura de Jaime González para el Tribunal de Cuentas, con propósito de situarle en el Consejo Nacional de la Energía. Este intento de desbloquear la negociación fue a la postre inútil, porque los socialistas rompieron el diálogo en protesta por la afirmación de Rato de que la única 'cualidad' de González era la de ser amigo del secretario general del PSOE, Rodríguez Zapatero.

Una disculpa ofrecida por Arenas, y pactada entre PP y PSOE, permitió restablecer el pacto entre populares y socialistas, que quedó ayer reflejado en el pleno del Congreso. Los resultados de las votaciones oscilaron en función de que los grupos minoritarios se encontraban más o menos identificados con los candidatos propuestos. El máximo número de votos lo cosechó el bloque de los cuatro juristas propuestos por los partidos, porque Izquierda Unida también respaldó a Félix Pantoja, que con 314 sufragios se alzó con el mayor apoyo registrado en las votaciones realizadas ayer. En extremo opuesto, Roberto García Calvo, con 279 votos.

El magistrado electo del Constitucional Roberto García Calvo.
El magistrado electo del Constitucional Roberto García Calvo.CRISTÓBAL MANUEL

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_