Gerry Adams pide al IRA la entrega inmediata de todos sus arsenales
La destrucción de parte de los arsenales republicanos norirlandeses parece inminente
Gerry Adams, presidente del Sinn Fein, el brazo político del IRA, lanzó ayer un histórico llamamiento al grupo armado para que adopte una 'iniciativa rompedora' en el envenenado contencioso de las armas para salvar el proceso de paz en Irlanda del Norte y el acuerdo de Viernes Santo. Ese gesto pionero no es otro que la destrucción de sus arsenales de guerra. El anuncio del IRA confirmando la destrucción de alguno de sus depósitos clandestinos parece ya inminente y obligaría a los unionistas protestantes a volver al Gobierno autónomo, del que dimitieron la semana pasada.
El discurso pronunciado ayer en Belfast por Adams ante las bases de su partido iba dirigido tanto a sus filas republicanas como a los adversarios unionistas y al Gobierno británico. Significa la culminación de varias semanas de intensos movimientos entre bastidores, que hacen pensar que cualquier gesto del IRA que conlleve la destrucción física y verificable de parte de sus depósitos irá seguida de inmediato de una reacción del Gobierno de Londres favorable a las exigencias tradicionales de los republicanos.
Es una declaración 'altamente significativa' por venir de quien viene, declaró enseguida el ministro británico para Irlanda del Norte, John Reid. Horas antes, éste había hecho un significativo llamamiento a favor del desarme. 'No quiero subestimar las dificultades que para los grupos paramilitares supone el asunto de las armas. Sólo quiero decir a los paramilitares: si sois capaces de hacer lo que la gente de Irlanda del Norte quiere con desespero -poner las armas fuera de uso y adoptar el camino político-, creo que no podréis decir que la respuesta de este Gobierno, del Gobierno irlandés, de la Administración estadounidense y de toda la comunidad internacional sea de mala gana o poco generosa', dijo el ministro.
Horas después, Adams afirmó que él mismo y el número dos del Sinn Fein, Martin McGuinness, habían tenido conversaciones con el IRA y que ambos le habían hecho ver la importancia de tener una iniciativa 'rompedora', dijo textualmente en inglés. McGuinness dijo desde Nueva York que, aunque sería un movimiento 'difícil' para el IRA, la organización está obligada 'a construir un genuino proceso de paz'. Es la primera vez que el Sinn Fein hace un llamamiento a su propio ejército, que sólo puede ser interpretado como una petición de que empiece a destruir sus armas. Y destruir las armas de un ejército no es otra cosa que destruir el ejército en sí mismo.
El llamamiento de Adams es interpretado como un indicio de que ese desarme es inminente. Sólo cabe una alternativa a esa hipótesis: que el debate en el seno del IRA aún no haya acabado y los partidarios del proceso político intenten ahora presionar para decantar la balanza a su favor.
Pero el tono y el fondo de las palabras de Adams hacían pensar que el debate interno ha sido ya ganado por los partidarios del abandono definitivo de la lucha armada. 'Son momentos difíciles para muchos republicanos', admitió Adams por un lado, mientras por el otro hacía también un llamamiento a los rivales unionistas para que esta vez no desprecien el gesto que prepara el IRA: 'Llamo a los líderes del unionismo para que se junten con nosotros, haciendo lo que hay que hacer para que todo nuestro pueblo pueda ir hacia delante en un camino de igualdad'.
El proceso de paz en Irlanda del Norte se encuentra en un momento extraordinariamente delicado: las instituciones de autogobierno están políticamente bloqueadas desde el 1 de julio y la violencia en los barrios más conflictivos de Belfast es ya casi cotidiana.
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